Desde el inicio de la crisis hasta hoy, las medidas adoptadas por las instituciones han sido para recortar derechos sociales y laborales de la mayoría de la población.
En el caso de las personas pensionistas, la congelación de nuestras pensiones para el año 2012 ha supuesto la pérdida de nuestro poder adquisitivo. Pérdida que afectará aproximadamente 385,000 pensionistas en Hego Euskal Herria, cuya pensión media se sitúa en torno a los 870 euros.
Casi la mitad de estas personas viven en situación de pobreza, y una vez más, las mujeres se llevan la peor parte, encontrándose en situaciones de pobreza grave.
Las personas pensionistas no tenemos ninguna posibilidad de negociar y mejorar nuestras pensiones, ya que las decisiones las toman en Madrid en nuestro nombre. Además, ni una ni otra cuestión preocupa a los gobiernos de Iruñea y Gasteiz. Uno y otro, están más preocupados en cómo sacar del atolladero a los especuladores, que en garantizar nuestro bienestar. Hay dinero, hay mucho dinero pero está mal repartido.
Desde el área de personas pensionistas y mayores del sindicato LAB, reivindicamos un reparto justo y equitativo de la riqueza. En este sentido, exigimos a los Parlamentos de Nafarroa y de la EAE, la elaboración de unos presupuestos que garanticen unas condiciones de vida dignas para las personas pensionistas. En definitiva, la necesidad de una política presupuestaria más redistributiva.
Si aquí vivimos y trabajamos, aquí tenemos que tener el control y la decisión respecto a las cotizaciones que nos descuentan todos los meses y las prestaciones que recibimos.