CEBEK celebra hoy una jornada sobre salud laboral en su sede de Bilbao. Con motivo de esta cita, LAB se ha concentrado ante la sede de la patronal vizcaína para denunciar la falta de medidas preventivas contra la silicosis.
En la movilización se ha interpelado a los empresarios ante la falta de medidas preventivas contra la silicosis.
Lectura de los y las trabajadoras de Fumbarrri
Dramática situación de la plantilla de Fumbarri ante la epidemia de casos de silicosis
«Fundiciones Fumbarri-Durango SA es una fundición enclavada en Durangaldea, con dos centros de trabajo, uno en Durango y otro en Abadiño. Ante la grave situación que estamos viviendo con la problemática de la silicosis los delegados de LAB queremos manifestar:
– Huelga decir que la silicosis es una enfermedad profesional crónica, incurable y que puede verse agravada hasta llevar a la muerte, que se contrae como consecuencia de la falta de medidas de seguridad en relación a la inhalación del polvo de sílice (por exposición prolongada en el tiempo e inhalación por encima de los valores tolerables).
– En el año 2011 se detectan 3 casos de trabajadores a los que se les diagnostica “silicosis crónica simple”. En años posteriores se siguen detectando nuevos casos, llegando en la actualidad a 9 trabajadores enfermos (10% de la plantilla de la empresa) a los que hay que añadir 6 nuevas sospechas durante este año 2014. Sin olvidar que la silicosis no apareció de repente en Fumbarri. Ha habido casos anteriores a esta fecha con nombres y apellidos.
– El art. 14 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece que la primera responsable de velar por la salud y seguridad de los trabajadores y trabajadoras es la empresa.
– Pues bien, en Fumbarri observamos con preocupación la actitud de pasividad, irresponsabilidad y desidia que demuestra Fumbarri hacia este problema, que en vez de intentar garantizar los puestos de trabajo a los trabajadores enfermos, de realizar mejoras e inversiones para adecuar los puestos de trabajo para que no siga enfermando la plantilla, solo piensan en la productividad y en el máximo rendimiento económico, lo que para nosotros es un drama y una condena para ellos es una oportunidad de despedir a trabajadores enfermos eludiendo su responsabilidad.
– Recordar que invertir no tiene que suponer poner en riesgo el proyecto empresarial: las cuentas de Fumbarri y las de sus socios están sobradamente saneadas, millonarios repartos de dividendos y sobresueldos según se desprende de los datos económicos de los últimos 5, 10 y 15 años.
Por el derecho a la salud y en defensa de nuestro puesto de trabajo.»