Desde que se decidió por parte de Mondragón dejar caer a Fagor Electrodomésticos la suerte de la empresa estaba hechada. Liquidar el problema de viabilidad de la misma manera que lo resuelve cualquier sociedad anónima, mandando a la gente a la calle, muestra las debilidades de un proyecto cooperativo que necesita a todas luces una reflexión profunda y un plan de viabilidad para fortalecer los lazos de solidaridad, la implicación de trabajadoras y trabajadores y el compromiso firme por sacar este país de la situación en la que se encuentra. No estamos de acuerdo con la decisión tomada.
Por parte del Estado porque mientras es capaz de dar miles de millones de euros para los bancos, con o sin plan de viabilidad que lo justifique; no es capaz de financiar un proyecto ordenado de reestructuración empresarial de Fagor Electrodomésticos y mantenimiento del empleo a través del ICO o cualquier otro instrumento financiero.
Por parte del Gobierno Vasco, porque estamos hartos de repetir tras los años de crisis que no se pueden aplicar las mismas políticas que dieron origen a la crisis para salir de ellas. Recortar servicios, reducir el peso del sector público y bajar los salarios nos mete mas y mas en la crisis. Porque permanente estamos exigiendo que aquí en Euskal Herria no se pueden aplicar las mismas medidas que se aplican en España, porque la situación política, social y económica es diferente y porque nuestra aspìración debe ser situarnos en parámetros sociales y económicos de paises de similar productividad y renta per cápita a la nuestra. Fagor electrodomésticos y tantos otros son la prueba evidente del fracaso de esas políticas y lo mas responsible sería cambiarlas de raíz. ¿Cómo es posible que Kutxabank habra una linea de crédito de 1.000 millones de euros en el banco malo para la compra de pisos en España y no tenga ninguna posibilidad de financiar un plan de viabilidad empresarial aquí? ¿Qué pasa con Caja Laboral, no tiene nada que decir al respecto?
Y al resto de instituciones con o sin competencias tienen que comprometerse con un plan efectivo de creación de empleo y de exigencia y apoyo para la viabilidad de un proyecto que no deje a nadie en la calle. Las 4.000 personas que se van a quedar sin su medio de vida no esperan otra cosa. Se tendrán que tomar las medidas políticas, sociales e institucionales necesarias para que nuestras instituciones sirvan realmente para satisfacer las demandas de la ciudadanía vasca.
Nosotras y nosotros estamos dispuestos a pelear por ello. Necesitamos un acuerdo de país basado en un cambio radical de las actuales políticas públicas, y entre tanto, adheriéndonos a la convocatoria realizada por el consejo social, llamamos especialmente a todos los trabajadores y trabajadoras socios de Fagor Electrodomésticos y trabajadoras y trabajadores de las contratas, a participar en la manifestación de mañana jueves en Arrasate a las seis de la tarde.
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