Las trabajadoras de subcontratas de limpieza de Osakidetza tienen sus condiciones laborales homologadas. Así, éstas tienen que tener las mismas condiciones que las limpiadoras de Osakidetza, pero las empresas no quieren aceptarles a las trabajadoras subcontratadas las mejoras que han tenido las limpiadoras de Osakidetza desde 2015 hasta ahora. Hoy se han movilizado en el Hospital Universitario Araba de Gasteiz ante este recorte de derechos. Se han concentrado ante el edificio de consultas externas y, después, han realizado una sentada ante el despacho de los responsables de la OSI Araba, en la 4ª planta del hospital de Txagorritxu.
En semanas anteriores han hecho lo propio en el Hospital de Cruces, en Barakaldo, y en el Hospital Donostia.
Tras 38 reuniones de la mesa negociadora ha quedado claro que quieren quitar la homologación a las trabajadoras de subcontratas de limpieza de Osakidetza. Iniciaron la negociación del nuevo convenio en el año 2018, convencidas de que ésta iba a ser una negociación sencilla, puesto que estar homologadas con el personal de Osakidetza significaba tener únicamente que adecuar determinadas materias a los nuevos acuerdos que se han ido alcanzando: la carrera profesional del 2012, un sistema más amplio y justo de cobertura de vacantes, jubilación de relevo, permisos nuevos que ya tiene reconocido el personal de Osakidetza, etc.
Pero las empresas no han querido hacer la más mínima adaptación del Convenio. La homologación no significa únicamente tener las mismas subidas salariales que se aplican al personal de Osakidetza. La homologación es mucho más, significa tener los mismos complementos, las mismas licencias, las mismas opciones de ampliación de jornadas, las mismas facilidades de jubilación, etc.
Firmaron un convenio en el año 2015, un convenio de homologación, pero parece que esas condiciones que por aquel entonces reflejaban la homologación pretenden quedarse estancadas en la realidad del 2015. Las empresas se muestran inflexibles y mantienen la mesa bloqueada, un bloqueo que parece estar respaldado por Osakidetza, que no responde a ninguna de las solicitudes de reunión que les han hecho.
Las trabajadoras denuncian que fueron merecedoras de aplausos y palabras de reconocimiento durante la pandemia pero que ahora quieren robarles hasta lo que ya habían logrado.
Del mismo modo, hacen un llamamiento a las trabajadoras del sector a salir a movilizarse para decir claro a las empresas que la homologación no se toca.