Hoy, 21 de febrero, hemos tenido conocimiento de dos nuevos accidentes laborales mortales. El primero de ellos ocurrió el pasado 17 de febrero en el Bar Restaurante Chaparro, cuando L.E.B.B. de 45 años de edad sufrió un accidente no traumático y se avisaron a los equipos de urgencias, que cuando llegaron sólo pudieron certificar su muerte.
El segundo de ellos ha ocurrido esta madrugada, cuando el trabajador A.B.P. del barco pesquero Farillon, no ha vuelto al barco y se sospecha que cayó a la mar cuando se disponía a embarcarse.
Desde el sindicato LAB queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad con sus familiares, allegados y la clase trabajadora.
Detras de estos dos accidentes y de todos los accidentes de trabajo se encuentran las condiciones de trabajo y vida de la clase trabajadora. Condiciones que nos obligan a llevar un tipo de vida, de presión, de hábitos alimenticios etc que tienen una influencia directa sobre nuestra salud y nuestra vida.
Además, hay que destacar que en el accidente del “arrantzale”, parece ser que según las primeras informaciones nos encontramos supuestamente ante un accidente a la hora de embarcar, de subir al barco. Hace ya varios años, en el “Estudio de la situación de la prevención de riesgos en el sector pesquero de la CAE 2005” elaborado por Osalan, y en “Plan integral para la prevención de riesgos laborales en el sector pesquero de la CAE 2008-2011” se pone de manifiesto que o bien no existen pasarelas de acceso a los barcos, y que las que hay, o no se usan o son deficientes y todo ello supone un alto riesgo de caída al mar. Pero a pesar de ello, desde el Gobierno de Gasteiz y las autoridades portuarias no se ha puesto solución a este riesgo conocido. Pero desde la autoridad laboral, el propio Osalan y la inspección de trabajo no se ha llevado a cabo ninguna medida para paliar esta situación conocida y denunciada sindicalmente.
De igual manera tenemos que incidir en las condiciones especiales y duras que se dan en el sector, y el alto nivel de precariedad existente en el mismo. En este caso el trabajador fallecido llevaba una semana en el barco y hacia sustituciones, por lo que nuevamente se pone de manifiesto cómo esa precariedad, esa temporalidad son causas de accidentes de trabajo.
Desde el sindicato LAB consideramos intolerable este hecho y solicitamos que se investigue el accidente, se analicen las causas inmediatas y básicas que desencadenaron el accidente y se depuren responsabilidades en torno al mismo.
En Euskal Herria, 21 de febrero de 2012