Junto con la subida de la temperatura, aumenta el factor de riesgo que implican las olas de calor. Desde el sindicato LAB trabajaremos para identificarlo y limitarlo, con el objetivo de preservar la salud laboral, llegando a exigir el cese de la actividad en casos extremos.
En LAB insistimos una y otra vez en la importancia primordial de la prevención en materia de salud laboral. En esta ocasión, el secretario de Salud Laboral, Inko Iriarte, y la responsable de Acción Sindical, Oihana Lopetegi, han presentado la guía de acción sindical ante las cada vez más conocidas olas de calor. La guía completa puede consultarse aquí:
El capitalismo, a través del mito del crecimiento continuo, uno de sus pilares, ha traspasado las propias fronteras del planeta. El 2022 fue uno de los veranos más calurosos que hemos conocido hasta ahora; todos y todas recordamos los incendios que hubo el año pasado en Nafarroa. Este año, las temperaturas ya han superado los 30 grados en 43 días y los 35 en 21 días. Cada vez tenemos más días calurosos a lo largo del año y las temperaturas de esos días son cada vez más altas. El último informe del Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, en inglés) lo indica claramente: la temperatura del planeta va en aumento y el riesgo de sequías, olas de calor y cambios bruscos de temperatura se está multiplicando.
Esta nueva situación también nos ha llevado a adaptar la acción sindical y a centrarnos más en los riesgos que se generan en el trabajo por el calor. Además de realizar peticiones para identificar estos riesgos y poner soluciones, hemos optado por activar la acción sindical en caso de que las empresas no pongan solución.
Hoy hemos presentado el protocolo para poder actuar en los lugares de trabajo. Por un lado, explicamos lo que dice la normativa al respecto, es decir, lo legalmente exigible y controlable en los centros de trabajo. Por otro lado, determinamos la acción sindical a llevar a cabo en las empresas, recogiendo los pasos a dar para intentar limitar los riesgos. En última instancia, impulsaremos la suspensión del trabajo si se entiende que existe un riesgo grave e inminente, con el objetivo no sufrir consecuencias más graves.
En este sentido, LAB obligará a los empresarios a implementar las medidas de salud laboral obligatorias desde hace 27 años, como la evaluación específica adecuada a las características de cada trabajador o trabajadora, la puesta en marcha de medidas en función de los resultados de dicha evaluación (priorizando las medidas colectivas) y, por último, la adaptación del propio modelo de organización.
En caso de incumplimiento, responderemos con determinación y pasos organizados. El protocolo que llevará a cabo el sindicato ante situaciones de riesgo relacionadas con el calor será el siguiente:
1. Solicitar formalmente a la empresa la actividad específica de evaluación del riesgo legalmente recogida.
2. Informar a Osalan y a NOPLOI de la falta de mediciones específicas o de mediciones deficientes.
3. Comunicar a la inspección de trabajo la infracción y la exposición al riesgo.
4. Poner en marcha unilateralmente medidas organizativas. Se realizarán descansos/paradas en función de la sensación térmica.
– Ofrecer a los delegados y delegadas y afiliados y afiliadas recursos técnicos sencillos para medir la sensación térmica, así como información y formación.
– Forzar los descansos cuando la sensación térmica llegue a niveles peligrosos. Cuanto mayor sea la temperatura, más paradas/descansos (en locales climatizados) En un momento determinado, en situaciones límite, se pondrá en marcha el procedimiento de cese de la actividad, de acuerdo al artículo 21 de la Ley de Prevención.
Al final, a la empresa le saldrá más barato tomar medidas que sufrir nuestra acción sindical.