LAB apuesta por dotar de mayores competencias a los Ayuntamientos que toman parte en la Asamblea General. En la asamblea, son en total 237 votos los pertenecientes a los 74 Ayuntamientos participantes, mientras que los 7 representantes del Gobierno Vasco, obstentan 474 votos. Exigimos que la participación en la misma se rija por criterios de igualdad. Creemos que se ha de promover la participación de toda la comunidad educativa en los organos de decisión, y para ello, entre otras propuestas se ha de conseguir que el reparto de votos de quienes participan en la asamblea y de quienes queremos participar se haga de una manera equitativa.
En la asamblea que se celebra hoy se aprobarán los presupuestos y planes de gestión. LAB cree que en estos presupuestos se deben incluir nuevas partidas para, entre otros, lograr la total gratuidad del servicio educativo que ofrecen las haurreskolak, para poder mantener las aulas de 2 años dentro del primer ciclo de educación infantil y para poder lograr mediante la negociación la estabilidad de las trabajadores y un nuevo convenio laboral que desde el 2018 no se ha negociado.
Por otra parte, entre las diferentes intenciones del Departamento de Educación, se encuentra el delimitar el primer ciclo de educación infantil a la franja de edad de 0 a 2 años. En cambio, para LAB, al igual que para otros muchos agentes sociales y educativos y para muchas familias, este primer ciclo ha de continuar siendo para la franja de 0 a 3 años, además de tratarse de un ciclo euskaldún, de calidad, universal y gratuito.
Por eso mismo, LAB continúa exigiendo que tal y como el Parlamento Vasco solicitó al Gobierno Vasco, se sigan dando pasos en el camino abierto en el objetivo final de la gratuidad de las Haurreskolak. A día de hoy ya se trata de un servicio educativo gratuito pero únicamente para las familias con ingresos inferiores a 18.000 euros anuales. Exigimos la gratuidad total de las Haurreskolak para garantizar el derecho educativo desde el nacimiento basado en un principio de igualdad.
Así mismo, hace ahora un año el sindicato LAB registró en el Parlamento cientos de solicitudes en las que se reclamaba el deseo de que sus hijos e hijas de 2 años pudiesen seguir recibiendo la atención en las Haurreskolak. Desafortunadamente, todavía no hemos recibido respuesta alguna y la voz de la comunidad educativa sigue siendo desoída. Ni que decir de las necesidades, ritmos, ratios y espacios de las y los niños de 0-3 años. No tenemos ninguna duda de que las mejores condiciones de desarrollo de estas niñas se dan en nuestros centros de educación infantil.
Por todo ello, desde el ciclo 0-3 años y en el camino hacia la Escuela Pública Vasca Comunitaria, exigimos que sea tomada en cuenta la voz de toda la comunidad educativa. Si el Gobierno Vasco sigue por el camino contrario, nos tendrá enfrente.