Llevamos un año denunciando la altura de los asientos de los autobuses. Los asientos no bajan ni suben lo suficiente. Las y los trabajadores con altura alta o baja tienen problemas para poder conducir de manera cómoda. Al ser un problema que proviene de fabricación, hemos trabajado con la empresa compradora (Dbus) y las empresas productoras para informarles del problema y para que pongan soluciones. Pero aunque nos den la razón no hacen nada. Al parecer, han encontrado la solución, limitar las alturas de los conductores. Nos parece absolutamente vergonzoso.
Por otro lado, no estamos de acuerdo con la medida que limita el IMC que tienen las y los conductores. Un conductor o conductora que puede tenga un IMC alto no tiene por qué tener un problema de salud. No entendemos el motivo de esta medida.
Por último, la empresa Dbus ha puesto en marcha una campaña específica para esta convocatoria, con la cual pretende animar a las mujeres a participar en el proceso de selección con el objetivo de aumentar su presencia en el sector. Es sólo una campaña publicitaria. No han establecido ninguna medida efectiva para aumentar la presencia de las mujeres. Desde LAB solicitamos a la empresa que los puestos de trabajo reservados a mujeres para esta bolsa de trabajo sean el 60% de la convocatoria. Es decir, que el 60% de todas las plazas que se van a cubrir sean cubiertas por mujeres. Pero no solo eso, las empresas, con el apoyo de las instituciones públicas, tienen que poner en marcha un plan completo de formación para las mujeres para garantizar su presencia. Si esto no se hace, creemos que todo es sólo apariencia.
Dbus, con esta última convocatoria, nos ha demostrado que es más excluyente que nunca. Desde LAB le pedimos que publique nuevas bases, eliminando las condiciones anteriormente mencionadas e incorporando medidas que promuevan realmente la igualdad.