Así, ha vuelto a airear algunas medidas sobre conciliación y corresponsabilidad y nos ha querido entretener con un tema mediático como el del código ético. En torno al tercer eje que ha mencionado, en torno al trabajo y la estabilidad, no hay ninguna concreción.
Es totalmente denunciable que el Gobierno Vasco se niegue una vez más a negociar con los y las trabajadoras, ultimo indicio de que ha decidido dejar las formas a un lado, como en la reunion de Mesa General de la semana pasada. En todo el proceso no hemos tenido ninguna respuesta a las aportaciones realizadas por LAB al anteproyecto, que irá al parlamento tal y como decidieron PNV y PSE.
Aunque vayamos a analizar la abundante documentación recibida hoy mismo, estamos seguras de que no tendrá gran diferencia respecto al documento que presentaron en febrero. Y desde un principio denunciamos que este anteproyecto presentaba grandes deficiencias, que recordaremos a continuación.
• Se limita a un simple desarrollo de la legislación estatal, siguiendo la línea del Estatuto Básico del Empleado Público. Renuncia a la capacidad legislative que podría tener el parlamento y esto sitúa los servicios públicos a merced de las constantes injerencias del estado.
• Además, condena a los y las trabajadoras de las administraciones vascas a la temporalidad. La ley no regula las continuas ofertas de empleo, lo que nos subordina a la tasas de reposición que se implantan en el estado.
• No incluye medidas para finalizar con la era de los recortes. El Gobierno Vasco tiene una buena oportunidad de regular algunos derechos que han perdido los y las trabajadoras públicas, de pasar de las palabras a los hechos. Decir que no les gustan los recortes pero aplicarlos y perpetuarlos no es aceptable.
• El principal objetivo de la ley es incluir la perspectiva mercantilista. De la mano de los criterios neoliberales que están incluyendo en el estado, la Ley prevé fomentar las privatizaciones, amortizar puestos de trabajo y exigir movilidad plena a las plantillas. La ley quiere otorgar a las administraciones una unilateralidad total, de la misma forma que han hecho las distintas reformas laborales en el ámbito privado. Cabe destacar que el derecho a la negociación colectiva no se respeta totalmente en el anteproyecto de Ley, ya que no impone a la administración la obligación de llegar a acuerdos.
• Se ha perdido una oportunidad de oro para desarrollar temas que son muy importantes para la calidad de los servicios públicos. En la Ley no se observa ninguna apuesta por la salud laboral, la euskaldunización de los servicios públicos y la igualdad de oportunidades.
En LAB vemos claro que este anteproyecto no responde a las necesidades que hay en los servicios públicos vascos. La ley está totalmente subordinada y está prevista para desarrollar la perspectiva mercantilista. En nuestra opionión es necesario desarrollar toda la capacidad legislativa y al hilo de ello hemos realizado algunas propuestas.
• Una disposición transitoria para recuperar el poder adquisitivo.
• Que la negociación colectiva no quede supeditada a la cobertura presupuestaria.
• Recoger por ley el 100% del complemento por baja laboral.
• Cobertura de todas las sustituciones desde el primer día.
• Retirada de todas las medidas basadas en un enfoque mercantilista y clientelista.
• Procesos de designación de cargos de dirección transparentes y con participación de las plantillas.
• Medidas concretas que afronten la temporalidad, entre ellas la regulación de ofertas públicas de empleo que garanticen la cobertura de las vacantes existentes.
• Derecho de subrogación para todas las plantillas.
• Gestión pública del seguimiento de las enfermedades – ¡no a las mutuas!
• Medidas para la euskaldunización de los servicios públicos – garantizar el conocimiento del euskara en el ingreso a la función pública.
• Cláusulas feministas, para avanzar en la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres en las administraciones.
Junto a ello, creemos que el resto de propuestas que hemos realizado son totalmente viables. Sólo hace falta voluntad de negociar una verdadera ley nuestra en defense de los servicios públicos, y este gobierno deja muy claro cada vez que tiene la oportunidad que no quiere negociación.
Sabemos que para que patronal y administraciones se sienten en la mesa a negociar hay que presionar, que deben sentir la necesidad. Por eso hacemos un llamamiento a todos los trabajadores y trabajadoras públicas para que sigan movilizándose. LAB llevará a cabo una campaña de información y movilización para que esta ley no salga adelante, y para que se negocie una ley nuestra que esté al servicio de los y las trabajadoras vascas y la sociedad. También realizaremos la misma petición a los grupos parlamentarios, para que hagan frente a las imposiciones que llegan de Madrid y rechacen leyes nocivas como ésta que son meros desarrollos de esas imposiciones.