Hemos llamado a la huelga en el sector los días 29 y 30 de junio, con el objetivo de dejar claro que esta ciudad de servicios y macro eventos como los de la salida del Tour de Francia no es posible en estas condiciones laborales.
Tras la exitosa jornada de huelga de paros parciales llevada acabo el día 1 de junio, la irresponsable Asociación de Hostelería de Bizkaia sigue anclada en el inmovilismo y haciendo oídos sordos a las reivindicaciones de la personas trabajadoras del sector,
continuando con su pretensión de seguir empobreciendonos.
Mientras que en Gipuzkoa ya se ha alcanzado un acuerdo, y en Araba la mera convocatoria de una rueda de prensa ha sido suficiente para reactivar la negociación, en Bizkaia se niegan a escuchar y a atender las urgentes necesidades de sus plantillas. Seguimos sin subida salarial desde enero de 2020.
En este tiempo, hemos sufrido los ERTEs totales (que nunca supusieron una solución para el sector), luego los parciales (que supusieron terminar de flexibilizar por completo nuestras condiciones); vimos cómo la sociedad entera se manifestaba solidarizándose con las empresas del sector y hemos visto cómo en este tiempo el IPC ha subido más de un 12 % en este tiempo, nuestros salarios 0, los precios del sector han subido más de un 15%, nuestros salarios 0. Las empresas del sector pretenden aumentar sus márgenes de beneficio, una vez más, a costa de la clase trabajadora. Las empresas del sector quieren apretarnos hasta que terminemos de pagar la factura del COVID. ¡No lo vamos a permitir!
A nadie se le escapa cuáles son las condiciones laborales del sector y tampoco es ajeno a la población el incumplimiento de dichas condiciones. Junto con la subida salarial, el establecimiento de fichajes fidedignos resulta indispensable. Además existen otros
subsectores que necesitan aún mayor protección, como son las empresas de comida rápida y los riders, que exigimos que sean incluidos en esta negociación.
Por último, hay que tener en cuenta que este convenio también afecta al sector de colectividades, un sector precarizado, en el que la gran mayoría de las personas trabajadoras son mujeres, con contratos precarios y jornadas parciales, así como con unas importantes cargas de trabajo, quienes mientras se mantenga la negativa de la patronal a negociar su propio convenio, han de mejorar sus condiciones sumándose a una lucha de un convenio que ha día de hoy no recoge sus necesidades ni inquietudes.
Razones más que suficientes para que todos los sindicatos con representación en la Mesa de Negociación del Convenio de Bizkaia estemos luchando para dejar claro que esta ciudad de servicios y macro eventos no es posible en estas condiciones laborales; y por
eso llamamos a la huelga los próximos días 29 y 30 de junio.