Ha llegado la Korrika y ha llegado el momento en el que Osakidetza se blanquea la cara en lo que respecta al euskera. Es muy sencillo y espectacular coger el testigo y dar pasos con la carrera gigante a favor del euskera. Un momento perfecto para impulsar el euskera, comprar el kilómetro y reivindicar que ellos también están a favor del euskera. Políticamente correcto, además.
Pero estos son los únicos pasos que Osakidetza da a favor del euskera. Al menos adelante. Porque, quizá, Osakidetza corre en la carrera del euskera, pero hacia atrás. En la sanidad pública vasca podemos decir que los derechos de las y los euskaldunes se van recortando.
En lugar de darnos facilidades para trabajar en euskera, Osakidetza nos pone obstáculos. Ha puesto en marcha una nueva página web en la que quien quiera navegar en euskera tiene que hacer un gran esfuerzo que puede hartar a cualquiera. Quien trabaja en euskera y escribe así su evolutivo ha sufrido diferentes agresiones, y la gestión de Osakidetza permite este tipo de actitudes euskarofobas.
Hacer oposiciones en euskera para conseguir plaza puede ser una auténtica aventura (de ahí los nefastos datos de quienes hacen el examen en euskera). Aunque tener derecho a ser atendido en euskera, puede ser una verdadera cuestión de suerte.
Y podríamos alargar mucho la lista. Pero mientras tanto, Osakidetza llevará orgulloso el testigo ante la ciudadanía, invitando a sus trabajadores y trabajadoras a participar en la Korrika y dando a entender ante la sociedad que está a favor del euskera. De hecho, los responsables de Osakidetza siguen como siempre en lo referente al euskera: ¡poca voluntad y mucha decepción!