Recientemente la dirección de Osakidetza ha anunciado a traición el cierre inminente, el próximo 14 de mayo, de la lavandería del Hospital de Santiago (Gasteiz) en la que trabajan 17 personas de Osakidetza. Este servicio será entregado a la empresa INDESA, participada de forma mayoritaria por la Diputación Foral del PP en Álava y contrata parte de su plantilla entre trabajadores y trabajadoras que tienen algún tipo de discapacidad.
En primer lugar, esta privatización es contraria a varios Decretos y Acuerdo de la Mesa General, además del Acuerdo Parlamentario del 27 de febrero del 2002 con el propio PNV, entre otros. La palabra –ni la firma- del PNV no vale cuando de negocios se trata. El riesgo de que estas 17 plazas de operario de servicio sean “amortizadas” y desaparezcan es muy alto.
En segundo lugar, se precarizan gravemente las condiciones laborales del servicio de lavandería, ya que la empresa INDESA, con accionariado mayoritario de la Diputación de Álava, pero también capital privado (afán de beneficios) y gestión privada, ha sido denunciada una y otra vez por sus condiciones laborales precarias. Utiliza a personas con discapacidad como mano de obra barata, mientras los cargos directivos se llevan enormes sueldos de hasta 68.000 euros al año cuando la media del personal cobra menos de 1000 euros al mes (llegan hasta sueldos de 717 euros).
Frente a esta nueva privatización, este mismo viernes se llevará a cabo una manifestación en el H. Santiago (Gasteiz) y ya se están preparando nuevas acciones para impedirlo. Una vez mas, es hora de luchar por defender un sistema de salud público y de calidad.
Gasteiz, 7 de mayo de 2014