LAB no apoya la evolución de las Entidades de Previsión Social Voluntaria en los últimos años; critica que se aleje de la vocación de complementar el sistema de pensiones y provoque brechas entre los y las trabajadoras.
Ante la interpelación realizada en los últimos días por la asociación Asufin y la plataforma Agraviados por Geroa, LAB quiere reafirmar su posición respecto a este tema recordando las decisiones que ha tomado y hecho públicas hasta la fecha:
LAB suspendió a principios de año su participación en los órganos de dirección de las Entidades de Previsión Social Voluntaria (EPSV) como consecuencia de su valoración crítica con el desarrollo de los mismos.
Este sindicato está donde siempre ha estado con las pensiones: LAB tiene claro que para mejorar las condiciones de vida de las personas pensionistas, hay que apostar por reforzar el sistema público de pensiones. Esa es la lucha que llevamos a cabo junto con diferentes agentes sociales y asociaciones de pensionistas, la lucha por unas pensiones públicas dignas. Dicho sistema de pensiones debería ser público, propio, universal y solidario, y precisamente el actual sistema de EPSV nos aleja de este objetivo por las siguientes razones:
• Las EPSV no son solidarias, cada persona ahorra lo suyo y han anulado por completo los débiles gestos de solidaridad que podían tener en un principio.
• No son universales. Una parte importante de la clase trabajadora queda fuera de la cobertura de las EPSV, especialmente los sectores más precarios y feminizados. Además, en la EPSV GEROA, que engloba a diferentes sectores, se realizan diferentes aportaciones en función del sector o empresa, siendo también en estos casos los sectores precarios y feminizados los que menos aportan. En consecuencia, aumentan las brechas entre los pensionistas y favorecen la división entre los y las trabajadoras.
• Cuando las personas se jubilan, además de que se permita el rescate de las EPSV en forma de capital, la ley ofrece bonificaciones fiscales para dichos casos. Ello nos aleja del objetivo original de complementar el sistema de pensiones. Además, en el caso de GEROA, facilitaron el cobro en forma de capital en 2015, rebajando considerablemente el capital necesario para ello. LAB fue el único que no apoyó la medida. Se podía prever, y así ha ocurrido, que las decisiones en torno a la capitalización traerían, entre otras cosas, una división entre las y los trabajadores.
Por todas estas razones, en la actualidad las EPSV se entienden como un producto de ahorro, obviando la aportación que las EPSV deberían hacer al sistema de pensiones. La principal razón para que se haya reforzado este enfoque ha sido la evolución de la EPSV en los últimos años, una evolución que no ha sido apoyada por LAB.
En consecuencia, por un lado, las EPSV se han alejado de su vocación inicial de complementar el sistema de pensiones; por otro, ha generado un choque entre diferentes trabajadoresy trabajadoras, porque se ha permitido que se entiendan como un producto de ahorro. Desde LAB también hemos planteado la necesidad de un debate ante la situación creada.
LAB no ha sido ni será corresponsable del modelo que critica. Seguiremos trabajando para mejorar las condiciones de vida de los pensionistas, concentrando fuerzas en favor de las pensiones mínimas, contra las brechas de pensiones, en la defensa de un sistema de pensiones propio y público.