A convocatoria del sindicato LAB, unas cuarenta personas se han concentrado hoy frente a la sede de la Escuela Oficial de Idiomas de Pamplona para denunciar que el Departamento de Educación de Navarra ha decidido reducir la oferta de las escuelas oficiales de idiomas de Tudela y Pamplona para el curso 2022-2023, disminuyendo el número de grupos creados. LAB considera que este es el enésimo ataque de la Administración al euskera y un nuevo recorte de los servicios públicos, ya que supone una vulneración del derecho de los y las ciudadanas que desean aprender idiomas. Por tanto, este sindicato se reafirma en la petición de dimisión del consejero Carlos Gimeno, que ya realizó hace varios días.
En Tudela, al parecer el Departamento condicionará la continuidad de los grupos a que estos estén formados por un mínimo de 10 personas para que puedan seguir adelante y, en general, disminuirá el número de grupos tanto en Tudela como en Pamplona, lo que recortará la oferta lingüística a la ciudadanía. Esto, además, podría poner en peligro la continuidad del proceso de aprendizaje no solo en euskera, sino también en las otras lenguas, ya que podría ocurrir que no salieran grupos en los seis niveles existentes.
Así, en la Escuela de Idiomas de Tudela el Departamento reducirá de 26 a 22 el número de grupos de Inglés y de 6 a 3 los de Euskera y Alemán; en total, habrá 10 grupos menos, 3 profesores menos -uno de ellos, en Euskera-. En la Escuela de Idiomas de Pamplona, por su parte, la previsión es cerrar 2 grupos en Euskera -antes se habían cerrado ya otros dos-, 2 más en Inglés, suprimir 3 de Alemán, pasando de 21 a 18; y aunque a los Departamentos de Francés e Italiano no se les cerrará ningún grupo el curso que viene, hay que tener en cuenta que en años anteriores ya perdieron varios.
La propia dirección de la Escuela de Idiomas de Tudela ha señalado que el recorte que piensa aplicar Educación allí supondrá una pérdida importante para la Ribera. El sindicato LAB, por su parte, quiere incidir en que estos recortes perjudicarán no sólo a la ciudadanía, sino también a los y las trabajadoras, y recordar que se sumarán a las vulneraciones de derechos que ya se están produciendo en la enseñanza, como la denegación de la reducción por edad a docentes a los que les corresponde.
Esta denuncia de las Escuelas Oficiales de Idiomas se une al descalabro generado por el Departamento de Gimeno en diferentes ámbitos: numerosos ataques al euskera, la estabilización del PAI, la imposición de los ciclos bilingües en la Formación Profesional, la situación de precariedad que ha llevado a las trabajadoras del primer ciclo de Educación Infantil (0-3) a la huelga indefinida, la imposición de la jornada y de las actividades extraescolares ante el COVID-19, la falta generalizada de negociación y comunicación en todos los ámbitos, también ignorando a las ikastolas y el sector de la enseñanza concertada, el no cumplimiento del Pacto para la Mejora de la Calidad de la Enseñanza Pública… Por todo ello, desde LAB insistimos en que Gimeno debe dimitir, por no gestionar adecuadamente el Departamento que tiene a su cargo.