Se ha llevado a cabo el primer juicio colectivo en Araba de cara al reconocimiento laboral de los y las trabajadoras de GLOVO. El sindicato LAB, en coherencia con el recorrido realizado estos últimos años, nos hemos movilizado para defender el carácter laboral de sus contratos.
Esto supone un primer paso frente a la llamada Uberización de las relaciones laborales, que a día de hoy nos aboca a acudir a los juzgados a pesar de que la Ley Rider supuso un paso importante. Siendo ésta quizás la primera de las cuestiones a denunciar hoy: ¿cómo es posible que, habiendo doctrina del Tribunal Supremo, esta empresa pueda seguir arrastrando impunemente al juzgado a sus plantillas para el reconocimiento de los derechos laborales más básicos?
En otro orden de cosas, vemos como se dilata la tantas veces anunciada regularización del sector, dando pie a los grandes lobbies que apuestan por la digitalización a seguir ejerciendo su presión. Es el momento de que los partidos políticos se posicionen en Euskal Herria y adquieran un compromiso, no sólo con las y los repartidores a domicilio, si no con todos los sectores afectados por estas prácticas fraudulentas.
Por todo ello, nos hemos concentrado ante los juzgados en respaldo y solidaridad hacia las y los riders y en defensa de sus derechos laborales.