En estos momentos en los que estamos en pleno periodo concentrado de elecciones sindicales, Garbiñe Aranburu, secretaria general de LAB, e Izaskun García, secretaria de Organización, han realizado ante los medios una primera valoración de los resultados de las elecciones sindicales. Garbiñe Aranburu ha destacado que, pese a que aún no ha finalizado el periodo concentrado, ya hemos cumplido todos los objetivos y que el crecimiento de LAB no tiene pausa: “No hemos tocado techo, tenemos posibilidad de seguir creciendo”.
Resultados del sindicato LAB y su evolución en las elecciones sindicales
Si atendemos a los datos, observamos que hemos alcanzado nuestro máximo histórico en 2018 y que hemos cerrado el año con el sindicato afianzado en segundo lugar en la Comunidad Autónoma Vasca. Hemos pasado en la CAV de tener una representación del 18,34% en 2014 al 19,1% de 2018.
En Nafarroa también nos situamos en máximos históricos, por encima del listón del 16%. Somos el sindicato que más ha crecido en el herrialde navarro.
Así las cosas, cada vez estamos más cerca del segundo sindicato en Hego Euskal Herria, con un 18,35% de representación, a 1,64 puntos de CCOO.
Para analizar la evolución entre diferentes periodos concentrados arrancamos desde 1994; 1994 en la CAV y 1995 en Nafarroa, años en los que se regularon los procesos de elecciones sindicales. LAB ha ido creciendo entre 1994 y 2018 entre los diferentes periodos concentrados. De hecho, es el sindicato que más ha crecido en la CAV, con una subida de 4,21 puntos. En Nafarroa, ese incremento es de 5,33 puntos.
En favor de un marco propio
Garbiñe Aranburu ha hecho la lectura de los datos y ha remarcado que la expasión que está teniendo LAB, tanto en las elecciones sindicales como a nivel de afiliación, lo pondremos al servicio de las necesidades de las y los trabajadores.
De todos estos datos, según señala la secretaria general de LAB, se pueden extraer conclusiones claras. Concretamente, cada vez más, las y los trabajadores de Euskal Herria apuestan por un sindicalismo concreto: sindicalismo que haga frente al proceso de precarización. Por consiguiente, cada vez es mayor la distancia entre el sindicalismo de contrapoder y el sindicalismo de concertación. El fortalecimiento de LAB es decisivo en la apertura de esta brecha. “Las y los trabajadores de Euskal Herria nos han trasladado un mandato muy claro con su voto: no quieren sindicalismo de concertación, no quieren ser parte del sistema, están en favor de la organización y la lucha sindical y sitúan la alternativa aquí mismo, en el ámbito propio, mediante el impulso del marco propio”, ha explicado Garbiñe Aranburu.
La oferta sindical de LAB tiene muy en cuenta ese aspecto, junto a una acción sindical renovada enriquecida con perspectiva feminista, con iniciativas y propuestas concretas para superar la división de la clase trabajadora y el individualismo; dando apoyo a la movilización social y a las diferentes luchas abiertas, codo con codo, en favor de las luchas del movimiento feminista y de las personas pensionistas, de las y los jóvenes, de las y los presos y de las luchas en los centros de trabajo. “En favor de la lucha por lograr la transformación social, combinándola con la lucha en favor del indispensable cambio político, trabajamos en defensa de un nuevo marco, en favor de un marco propio de relaciones laborales y protección social”, ha señalado.
LAB saldrá fortalecido de este proceso electoral y pondrá toda la fuerza obtenida al servicio de los retos laborales, sociales y políticos que nos corresponde como clase trabajadora, impulsando la unión de fuerzas entre realidades diferentes, en favor de un nuevo modelo social y económico, en defensa de la lucha por una vida digna, fundiendo esa lucha con la necesidad de democracia y soberanía.
Tal y como ha subrayado Garbiñe Aranburu, “LAB pondrá su expansión y fortalecimiento al servicio de las necesidades y luchas de las y los trabajadores”.