Trabajadoras de subcontratas de Educación, es decir, trabajadoras de limpieza, comedores y transporte escolar, se han movilizado en la plaza de Arriaga de Bilbo, a convocatoria de LAB, ELA, CCOO, UGT y ESK. Concretamente, han hecho un llamamiento a las trabajadoras del sector a secundar la huelga convocada para el 15 de septiembre en el ámbito educativo de la CAV por un regreso presencial en educación que sea seguro y saludable.
Este es el llamamiento realizado por las trabajadoras de los citados sectores:
Somos trabajadoras que formamos parte de la comunidad educativa, somos trabajadoras del transporte escolar, de los comedores o de la limpieza. La mayoría mujeres, que realizamos trabajos básicos con jordanas reducidas y contratos discontinuos, invisiblilizadas y precarizadas. Sin nosotras no hay inicio de curso educativo. Pero tanto Educación como las Patronales siguen sin tomarnos en consideración.
Las limpiadoras de las escuelas hemos estado trabajando durante toda la pandemia porque nuestro trabajo es fundamental. Sin embargo, nuestras demandas históricas de dignificación del empleo no se han tenido en cuenta, como si la limpieza fuera una función propia de las mujeres. En este inicio de curso, seguimos teniendo salarios bajos, jornadas parciales y cargas de trabajo insostenibles. Las aulas se han reabierto y el trabajo se ha multiplicado pero apenas se han realizado nuevas contrataciones, al menos no tanto como se comprometió Cristina Uriarte. Tanto el Departamento de Educación como la patronal siguen sin reconocer el valor de nuestra función.
Las trabajadoras de los comedores escolares y del transporte escolar vivimos con preocupación los tiempos de confinamiento, y desde entonces, hemos llevado a cabo diversas movilizaciones planteando alternativas, solicitando reuniones al Departamento de Educación, como presentando protocolos para la puesta en marcha segura de comedores y autobuses. Pero tanto Educación como las Patronales han hecho oídos sordos y no se han sentado ni siquiera con las representantes de las trabajadoras.
La función que desempeñamos en la comunidad educativa es fundamental. Pero no se nos tiene en cuenta. Para cumplir nuestras funciones es imprescindible bajar los ratios, aumentar las jornadas y contratar más personal. Reforzar el servicio de limpieza, comedor y transporte escolar es imprescindible para que nuestros hijos e hijas vuelvan de forma segura a las aulas. Y todo esto, hay que acordarlo con la representación de las trabajadoras.
Es hora de darle el valor que corresponde al trabajo que realizamos. No vamos a consentir seguir siendo mujeres silenciosas, dóciles y precarizadas; por eso, nosotras también, el 15 de septiembre vamos a la huelga, a favor de un retorno educativo presencial, seguro y consensuado.