Desde LAB queremos denunciar las numerosas actuaciones policiales inadecuadas, arbitrarias y desproporcionadas que se han producido en las últimas semanas. También rechazamos la campaña institucional promovida para blanquear al Ejército Español, la Policía Española y la Guardia Civil. Sin ningún tipo de vergüenza, están utilizando a las diferentes policías municipales para hacer propaganda recentralizadora. Nos parece especialmente grave y doloroso que en el homenaje organizado en el Cuartel de Intxaurrondo participara la Guardia Municipal de Donostia.
En este difícil contexto, nos parece imprescindible subrayar la importancia de los valores que deben ser el eje de la actuación de la Policía Local, en la medida en que una policía de proximidad ha de ser ser ciudadana.
En un momento en el que toda la sociedad debe cuidarse mutuamente, resulta más necesario que nunca destacar el carácter comunitario que caracteriza a la Policía Municipal. En este momento, la prioridad es la salud de los trabajadores y trabajadoras, y en este ámbito la Policía Municipal puede aportar mucho (queremos subrayar que, en muchos casos, así está siendo), investigando, por ejemplo, la existencia de medidas preventivas para los trabajadores y trabajadoras que prestan servicios esenciales.
La situación actual requiere de comportamientos solidarios y responsables, y la aportación de las diferentes policías locales debe ser necesariamente pedagógica.
Los ayuntamientos son las instituciones públicas más cercanas y quienes formamos parte de la Policía Local debemos actuar, sin excepción, como lo que somos: trabajadores y trabajadoras municipales, aportando en auzolan, en beneficio de la sociedad.
El sindicato LAB defiende un modelo de policía local basado en la cercanía y la integración con la ciudadanía, activo para contribuir a la construcción de la comunidad; una comunidad enmarcada en una nueva organización social, económica y política que garantice el bienestar de toda la ciudadanía.
Las viejas recetas de siempre no nos sacarán de esta crisis. Menos aún el modelo policial que promueve el capital. Es hora de construir un marco público que proteja a las personas y garantice una vida digna.
Y para esta apuesta, será imprescindible la aportación de la Policía Municipal.