La calidad del sistema educativo y las condiciones dignas de trabajo no son una prioridad para el Gobierno Vasco ni para el Departamento de Educación. Todo lo contrario, la prioridad era rebajar la deuda adquirida con los bancos, en vez de abordar la inversión necesaria para el sistema educativo. Por ello los sindicatos STEILAS, LAB y ELA solicitamos al Gobierno Vasco que cambie de raíz sus políticas educativas, aumentado la inversión en educación, aumentando las plantillas, estabilizando los puestos de trabajo, sustituyendo las bajas desde el primer día, disminuyendo las horas lectivas a partir de los 58 años y facilitando la jubilación, no castigando las bajas por enfermedad y recuperando el poder adquisitivo perdido.
Nota de prensa de STEILAS, LAB y ELA
La calidad del sistema educativo y las condiciones dignas de trabajo no son una prioridad para el Gobierno Vasco ni para el Departamento de Educación.
Así, en la mesa sectorial de la enseñanza pública, se nos dejó claro que la prioridad era rebajar la deuda adquirida con los bancos, en vez de abordar la inversión necesaria para el sistema educativo, dando la espalda a las necesidades de la plantilla, alumnado y familias.
El Gobierno Vasco sólo invierte en educación el 3,6% de la riqueza generada (frente al 5% en la UE28). Desde 2009 han recortado el presupuesto en 222 millones reduciendo la inversión del 4,3% al 3,6%. Sin embargo, el pago de la deuda se ha incrementado del 0,8% al 11,1%, es decir, en 1.086 millones de euros.
Año tras año, los gobiernos de Madrid y Gasteiz están imponiendo recorte sobre recorte hasta hacer insostenible la situación del profesorado. Al igual que en el resto de ámbitos de educación, las condiciones del profesorado del sistema público han empeorado sustancialmente en los últimos años.
Aunque el número de matriculaciones ha aumentado considerablemente en los últimos cursos, la plantilla no se ha visto incrementada en la misma proporción. Como consecuencia de este incremento de alumnado, actualmente el sistema tiene un déficit de 1.800 docentes.
El 31% del profesorado es temporal, con las consecuencias negativas que esto conlleva en la calidad de la educación, en la organización de los centros, y en las condiciones laborales de éstas personas. No obstante, el gobierno no ha mostrado el más mínimo interés por solventar esta situación de una vez por todas.
Para satisfacer las necesidades de plantilla y reducir definitivamente la temporalidad drásticamente, el gobierno debería estabilizar 6.000 puestos de trabajo.
A todo ello se suma que en muchas ocasiones no se cubren las sustituciones o se hace con una semana de retraso en la mayoría de los casos. Así, se pierden infinidad de horas cada curso, se aumenta la carga de trabajo del resto de docentes del centro y multitud de personas sustitutas se quedan sin trabajo.
Hay que añadir, además, que el departamento ha imposibilitado la jubilación anticipada o la reducción de la jornada lectiva a partir de los 58 años.
Todo ello hace que la edad media del personal docente se vea incrementada de forma exponencial y dificulte la renovación de la plantilla. Hay que tener en cuenta que la edad media del personal funcionario de carrera se sitúa por encima de los 50 años.
No olvidemos tampoco, que el Departamento de Educación sigue castigándonos por ponernos enfermos y enfermas, obligando en muchos casos a acudir a trabajar para no perder dinero.
Desde el 2010, además de recortar los salarios, nos han impuesto una reducción del poder adquisitivo de más del 13%, es decir, desde 2010, una pérdida de entre 24.000 y 40.000 euros dependiendo del cuerpo. Y todavía queda por devolver el 75% de la paga de 2012. Teniendo en cuenta esto, el incremento salarial del 1% planteado para 2016 resulta irrisorio.
El Departamento no quiere hablar, y mucho menos negociar sobre todo lo anterior. Sólo quiere continuar imponiendo su política de recortes sin importarle las consecuencias.
Es más, el acuerdo 2010-12, firmado con la minoría sindical y que dio comienzo a los recortes, está siendo modificado de forma unilateral, recortando puestos de trabajo en los centros educativos, precarizando condiciones laborales y aumentando la carga de trabajo del profesorado.
Los sindicatos STEILAS, LAB y ELA solicitamos al Gobierno Vasco que cambie de raíz sus políticas educativas, aumentado la inversión en educación, aumentando las plantillas, estabilizando los puestos de trabajo, sustituyendo las bajas desde el primer día, disminuyendo las horas lectivas a partir de los 58 años y facilitando la jubilación, no castigando las bajas por enfermedad y recuperando el poder adquisitivo perdido.
En la medida en que el Departamento de Educación no ha dado pasos en esta dirección, los sindicatos hemos dado comienzo a una fase de movilizaciones, concentrándonos frente al Gobierno Vasco en Bilbao. La próxima movilización se realizará el 5 de abril.