El mismo día, 26 de enero, al hilo del conflicto de Huerta de Peralta, LAB tiene una cita importante en Iruñea contra la precariedad y la explotación. Aún así, tenemos que tener claro que las convocatorias de Iruñea y Bilbo tienen un único objetivo: profundizar en la lucha por una Euskal Herria que se construya en función de las necesidades de trabajadores y trabajadoras.
La construcción de la 2a fase de la Variante Sur del Bilbao Metropolitano (más conocida como Supersur) es un proyecto que carece de lógica, social, económica y ecológica. Por lo tanto, y desde todas las perspectivas es un proyecto a detener. Cabe recordar la evolución que ha tenido la primera fase de la Supersur. No ha cubierto las expectativas de uso ni de lejos y además, ha sido una de las carreteras más caras del estado. Esto deja bien claro que no ha tenido ningún sentido desde el principio y que la construcción de la segunda fase supondría ahondar en ese agujero. El entorno de Bolintxu está definido como espacio a proteger por las características de la flora y la fauna que allí se encuentran. Si se construyera la segunda fase de la Supersur sufriría impactos considerables.
Así, pedimos que se abandone el proyecto de la Supersur; la política de movilidad de la Diputación Foral de Bizkaia no tiene planificación real ni sostenible. Entienden la política de infraestructuras como un ámbito de adjudicaciones y contrataciones y no como herramienta para construir un modelo que esté al servicio de la ciudadanía.