2024-08-25
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Los y las trabajadoras pagamos 917 millones en impuestos, mientras las empresas tan sólo 194


LAB ha escenificado frente al Parlamento el grave desequilibrio que genera la política fiscal existente en Navarra, puesto que el año pasado se recaudaron 1054,9 millones de euros mediante el IRPF (más de 917 de ellos procedentes de las rentas de trabajo) mientras que en el Impuesto de Sociedades, que pagan los empresarios, tan sólo se recaudaron 194,3.

LAB ha escenificado frente al Parlamento el grave desequilibrio que genera la política fiscal existente en Navarra, en el contexto de la Campaña de la Declaración de la Renta, puesto que el año pasado se recaudaron 1054,9 millones de euros mediante el IRPF (más de 917 de ellos procedentes de las rentas de trabajo) mientras que en el Impuesto de Sociedades, que pagan los empresarios, tan sólo se recaudaron 194,3.

Hay que hacer notar que actualmente, a pesar de que el número de empresarios es inmensamente inferior al de personas asalariadas, la riqueza generada (representada en el PIB) se reparte prácticamente a partes iguales.

Así pues, la desproporción es doblemente grave: una minoría de empresarios acapara la mitad de la riqueza producida, pero sólo paga en impuestos una quinta parte de lo que paga la clase trabajadora. Urge un cambio radical en la Política Fiscal para repartir la riqueza y darle la vuelta a la grave situacion social.

LECTURA DE LAB
Tiene que cambiar radicalmente la politica fiscal en Nafarroa para repartir la riqueza y darle la vuelta a la urgente situacion social

«Para poder contar con unas condiciones de vida dignas necesitamos de la educación, la salud y prestaciones sociales. Necesitamos políticas de creación y reparto del empleo y necesitamos servicios públicos universales y de calidad para combatir la desigualdad.

Sin embargo la política fiscal de UPN nos lleva por la dirección contraria. Privatizaciones, destrucción de empleo público, recortes en la renta básica, el deterioro en la la atención sanitaria, el abandono de la escuela pública,… son algunos ejemplos de ello. UPN ha diseñado una política fiscal que tan sólo provoca el aumento de la pobreza y la precariedad, la desprotección y las desigualdades.

Las rentas del capital en Navarra van creciendo de año en año, hasta alcanzar el 43,7% del total de toda la renta generada en Navarra. Sin embargo, las rentas del trabajo representan más del 87% del total de los rendimientos declarados por IRPF: un impuesto que aportó 1.054,9 millones de euros a la hacienda navarra en 2013, mientras que el Impuesto sobre Sociedades tan sólo recaudó 194,3 millones de euros.

El gobierno de UPN concede un trato privilegiado a los beneficios empresariales, a las rentas de capital y a los grandes patrimonios. ¿Cómo lo hace? Con una presión fiscal que está en Navarra 11 puntos por debajo de la media europea (28% del PIB en Navarra frente al 38,8% de la Unión Europea). El Gobierno de Navarra recauda menos haciendo que quienes más tienen aporten lo menos posible al bienestar colectivo. Ese es su modelo, que la mayoría pagamos y sufrimos: la mitad de las paradas y parados sin protección económica, aumento de las listas de espera en sanidad, recortes en las ayudas a la dependencia, recortes en la financiación de las escuelas infantiles,…

Y no contento con todo ello, el mismo gobierno que no deja de desviar cientos de millones de euros del dinero público a los bolsillos de sus amigos como en el Canal de Navarra o en el Tren de Alta velocidad, prepara una reforma fiscal aún más injusta. Nos quieren hacer creer que recaudando menos se va a reactivar la economía. Es todo lo contrario. Los regalos fiscales que UPN pretende hacer en su nueva reforma a los empresarios y a las fortunas más elevadas, rebajando el impuesto de patrimonio y de sociedades, nos van a hundir más.

Por eso desde LAB, exigimos darle la vuelta a la política fiscal para poder darle la vuelta a una situación social y económica crítica para miles de navarras y navarros. Nos negamos a que la política fiscal esté en manos de una élite política y económica que solo mira por ella, sus intereses y sus chanchullos. Exigimos:

• una política fiscal progresiva, que permita de verdad redistribuir la riqueza,
• una política fiscal que trate igual a todas las rentas, las de capital y de trabajo, dejando de favorecer a las rentas de capital, empresariales y de profesionales.
• Una política fiscal que persiga el fraude y la elusión fiscal

Necesitamos una política fiscal propia y soberana, con capacidad de recaudar y contar con medios económicos para hacer efectiva una mayor justicia social, así como la creación y el reparto del empleo.»

 

 

 

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