Hoy, 3 de diciembre, coincidiendo con la celebración del día de Nafarroa, los y las trabajadoras del campo, junto con el sindicato LAB, han salido a la calle para revindicar unas condiciones de vida dignas para todas las personas que vivimos en Nafarroa.
La mayoría de las personas trabajadoras del campo son migrantes, vienen de otros países y están trabajando la tierra navarra para que todos y todas podamos comer esas verduras frescas de las que con tanto orgullo hablamos. Un colectivo cada vez más grande en Navarra, pero que su situación de vulnerabilidad aprovecha la patronal para explotarles.
No decimos nada nuevo cada vez que desde LAB denunciamos que sus condiciones de trabajo no son buenas. Tienen salarios muy pequeños, unas condiciones de trabajo muy duro, tanto cuando hace mucho calor como cuando llueve, o nieva o caen heladas. Además, en muchas ocasiones les toca trabajar para terratenientes que no respetan los derechos laborales más básicos que se regulan en la ley.
Ahora que se está negociando el nuevo convenio en el sindicato LAB somos conscientes de que acabar con la precariedad, dignificar los salarios, acabar con los accidentes de trabajo y exigir el pago de la deuda colonial son requisitos indispensables. Por eso, nuestras reivindicaciones principales para el nuevo convenio son:
- La garantía de IPC en las subidas salariales, para que los sueldos suban igual que lo que ha subido la vida.
- Tener jornadas continuas con dos días de descanso consecutivo.
- El abono del transporte para evitar accidentes mortales por no poder pagar la gasolina y se vean obligados a ir a las 5 de la mañana por carreteras nacionales en bicicleta.
- Tener permisos que tengan en cuenta la distancia a la que se encuentran sus familiares y les permita ir a cuidarles.
- Poder cobrar el paro cuando no trabajan.
- Eliminar la injusta y esclavista categoría de peón recolector.
- Verdadero control de las jornadas de trabajo para evitar el fraude e impago de las horas que realmente se trabajan.
Por todo esto hemos salido hoy a la calle, para exigir que se acaben con los abusos patronales en el campo navarro, para reivindicar unas condiciones laborales iguales para todos y todas las ciudadanas de esta tierra y para reclamar a las instituciones que garanticen que todas las personas que vivimos en Nafarroa tengamos unas condiciones de vida digna.