El sindicato LAB ha denunciado con unos carteles en los que tilda a UGT y CCOO de “mamporreros de la patronal” la práctica antisindical que en los últimos meses están desarrollando esos dos sindicatos en Navarra. Ya que están alcanzando acuerdos en minoría sin respetar las mayorías y representación sindicales elegidas democráticamente por las trabajadoras y trabajadores, lo que demuestra que están al servicio de patronal.
En el año 2015 los sindicatos UGT y CCOO, al igual que le ocurriera a UPN y PSN en el plano político-institucional, perdieron la mayoría de la representación sindical en Navarra. Un cambio importante que lejos de ser algo anecdótico se mantiene en la actualidad, puesto que la suma de la representación de ambos no llega al 49%. Sin embargo, CCOO y UGT parecen decididos a seguir actuando como si nada hubiera cambiado, al servicio de las exigencias de los empresarios e ignorando la voluntad expresada democráticamente en las elecciones sindicales por miles de trabajadoras y trabajadores navarros.
De esta forma, en los últimos meses los sindicatos CCOO y UGT, en una clara posición antisindical, están alcanzado acuerdos en minoría en distintas empresas sin respetar las mayorías sindicales elegidas democráticamente por las plantillas. Unos acuerdos de eficacia limitada que no son de aplicación a todos los trabajadores y trabajadoras. Así, son sometidas al chantaje de firmar individualmente bajo la presión del todo o nada. Dicho de otro modo, estos acuerdos son utilizados por los empresarios para excluir a la legítima representación de las trabajadoras, desactivar las luchas sindicales y firmar a la baja las condiciones laborales.
Por ejemplo, tanto en Tasubinsa como en Caprabo-Eroski, CCOO y UGT han firmado sendos acuerdos con las direcciones de las empresas en minoría, sin respetar la representación sindical elegida democráticamente por las trabajadoras. De igual manera, con una firma que no representa a la mayoría de la clase trabajadora navarra aprobaron no derogar la reforma laboral del PP. Al contrario, la han apuntalado en contra de lo prometido durante años.
Por otro lado, en FCC, empresa dedicada a la limpieza de las calles de Pamplona, UGT y CCOO decidieron desmantelar la hasta entonces exitosa lucha unitaria y, además, procedieron a revocar a los delegados de LAB de los puestos de secretario y delegado de salud laboral en el Comité de Empresa. En ese mismo sector, meses antes, CCOO y UGT, en vísperas de una jornada de huelga y sin llegar al 50% de representación, volvieron a romper la unidad sindical y firmaron un convenio para cinco años que recoge subidas salariales totalmente insuficientes.
El sindicato LAB es consciente de que en las últimas décadas empresarios, CCOO y UGT junto con el apoyo de los gobiernos han actuado en connivencia en defensa de sus propios intereses. Sin embargo, esos tiempos han pasado (o deberían haber pasado) y las mayorías han cambiado. En consecuencia, LAB exige a UGT y CCOO que abandonen sus posiciones antisindicales y transiten hacia el respeto de las representaciones sindicales democráticamente elegidas por las plantillas navarras.