La protesta se realizará el próximo 19 de octubre, sábado a las 12:00 horas frente al Palacio de Navarra en Carlos III bajo el lema el lema "Justizia, Berdintasuna, Kohesioa euskaraz bizi nahi dugulako" ("Justicia, Igualdad, Cohesión porque queremos vivir en euskera").
Los sindicatos LAB, ELA, Steilas, ESK, Hiru, EHNE y CGT rechazamos rotundamente la sentencia del TSJN que anula varios artículos del Decreto Foral del euskara de 2017. Esta sentencia vulnera por enésima vez los derechos tanto de la ciudadanía navarra como de los y las trabajadoras, y da marcha atrás en los escasos pasos hacia adelante que dio el anterior Gobierno de Navarra en esta materia. No se puede tolerar la vulneración sistemática de derechos lingüísticos en la administración pública. En estos tiempos en los que el plurilingüismo está más valorado que nunca, resulta inaceptable tener que soportar estas situaciones que atacan claramente la igualdad de derechos lingüísticos. El euskara necesita leyes que lo protejan, ya que es nuestro idioma propio minorizado, necesita discriminación positiva y no seguir abriendo vías para que sea tratado como un idioma de segunda. Por todo lo anterior los sindicatos presentes exigimos al Gobierno de Navarra que recurra la sentencia contra el Decreto del euskara, y que en cualquier caso, aproveche las posibilidades del actual marco legal para defender y garantizar en su máxima expresión los avances en favor del euskara a los que da opción el Decreto.
Dicha sentencia demuestra que una nueva Ley del Euskara que sustituya a la de 1986 es imprescindible. Solo un nuevo texto con rango de Ley Foral que elimine la zonificación podrá garantizar los derechos de las personas vascoparlantes. Solo así, superando el actual marco, es posible que Navarra pueda regular un idioma que le es propio garantizando la igualdad de derechos lingüísticos para todas las personas. De lo contrario, tal y como ha ocurrido con la sentencia que rechazamos, serán los Tribunales quienes se encarguen de avalar jurídicamente posiciones absolutamente discriminatorias y que atentan contra nuestra capacidad de regular nuestra propia lengua.
Lamentablemente se ha vuelto a constatar que Navarra Suma, PSN (cabe recordar que varios consejeros acudieron a la manifestación contra el euskara convocada por la extrema derecha en junio de 2018) y varias organizaciones sindicales (en este caso UGT, Afapna, Sindicato Médico y Satse) están donde siempre: considerando el euskara como una lengua menor, confinada a la denominada zona vascófona y a ser posible, reducida al ámbito familiar, sin presencia pública ni prestigio social.
Por último, LAB, ELA, Steilas, ESK, Hiru, EHNE y CGT llamamos a reactivar la movilización y el esfuerzo político y pedagógico para defender el euskara.