Desde el Sindicato LAB, en primer lugar, queremos mostrar todo nuestro apoyo al trabajador gravemente herido, así como denunciar y manifestar nuestro absoluto rechazo y rabia ante lo ocurrido.
En el último año, en esta empresa hemos sufrido dos incendios, y hace dos meses, otro accidente de trabajo grave que causó otra amputación a otro trabajador. Por ello denunciamos las condiciones en materia de seguridad y salud que sufrimos los 150 personas que trabajan en Fundiciones Garbi y reclamamos una solución para que no tengamos un suceso similar. También exigimos que se investiguen las causas del accidente de hoy.
La representación sindical ha denunciado que en la empresa no se cumplen las medidas de seguridad ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, pero la empresa ha hecho caso omiso. Desde que hicimos esta denuncia ha habido dos trabajadores que han sufrido accidentes graves en el trabajo, por ello el culpable es la empresa al no tomar las medidas necesarias.
Fundiciones Garbi históricamente ha preferido aumentar el saldo de beneficios que invertir en la seguridad laboral de los y las trabajadoras. La precariedad en el trabajo es sufrida a diario y como consecuencia de ello hay accidentes graves como el sufrido hoy. No es posible que ir a trabajar sea sinónimo de arriesgarse la vida.
En el tema de la seguridad laboral tiene un importante papel el Gobierno Vasco. Su deber, entre otros, ha de ser el de asegurarse que se cumplen las medidas de seguridad laboral. En realidad es todo lo contrario, Imanol Pradales, responsable del Área Foral de Desarrollo Económico y Territorial, tras la visita a las instalaciones hace 5 meses, nos dejó el bonito titular de que en la empresa el “riesgo humano es cero”. ¿A qué vino realmente, aparte de sacarse la foto? Es hora de que el Gobierno Vasco se responsabilice en la seguridad y salud de los y las trabajadoras.