Además del impago de las nóminas, no se les aplicó el incremento del convenio de empresa firmado para los años 2020-2022, por lo que todavía les adeudan los incrementos 2022 y 2023. Además, la empresa no da pasos adelante en la negociación del convenio para los próximos años.
Tras pasar por un concurso de acreedores, SETE se vendió, pero los nuevos propietarios siguen sin poner al día las nóminas. Los pagos se retrasan todos los meses y esta situación se ha prolongado durante años. Por todo ello, denuncian que las condiciones de vida de las y los trabajadores se han deteriorado por completo y muchas veces, vamos a trabajar sin haber cobrado la nómina del mes y sin saber cuándo vamos a recibir el dinero.
Esta situación se ha vuelto insostenible para las plantilla y nuestras familias, y esto les ha llevado a secundar la huelga de hoy. Señalan que es hora de decir basta y que las y los trabajadores no van a permitir que sigan jugando con su dinero. «Hasta que no se pongan al día las nóminas que nos debe la empresa, haremos huelga cada semana, porque la lucha y la solidaridad es la única opción que tenemos los y las trabajadores», han declarado.