En rueda de prensa celebrada esta mañana han declarado que a partir de ahora, van a hacer huelga de lunes a viernes desde las 09:30 a las 14:00 horas. Según sus palabras llevan 18 años esperando a que se les reconozca como profesionales de la medicina y se les equipare retributivamente a los mínimos de médicos y médicas de Osakidetza. En estos últimos años han pasado por la Vice-consejería de Justicia varios partidos, PNV, PSE, EA… y nuevamente PNV. Las y los médicos del Instituto Vasco de Medicina Legal han visto de todo: buenas y no tan buenas palabras; peticiones de paciencia porque lo suyo se iba a abordar… Pero la paciencia ya se les ha agotado y no quieren esperar más.
Es hora de que sus tres reivindicaciones básicas sean cumplidas: derecho a la formación continua y especializada; derecho a un descanso mínimo después de las guardias y derecho percibir el mínimo de Osakidetza. El Departamento de Justicia tiene que entender que no estamos ante un conflicto que se pueda solucionar regateando. La cuestión de fondo es si las y los forenses tienen derecho a esos mínimos que durante dieciocho años llevan pidiendo.
El actual Departamento de Justicia de la CAV ha demostrado el enorme desconocimiento que tiene sobre las funciones que tienen las y los médicos, llegando casi al menosprecio, especialmente por parte del Director. ¿Saben acaso en el Departamento de Justicia con qué situaciones se tienen que enfrentar las y los médicos forenses cada día? ¿Qué tipo de personas acuden a sus consultas? ¿Sobre qué problemas y temas tienen que decidir?
Pues estamos hablando de víctimas de imprudencias o delitos, víctimas de agresiones, de robos con violencias, de malos tratos (mujeres, ancianos, ancianas, niños y niñas), de agresiones sexuales… También de personas que, debido a su salud mental, se debe decidir si se internan o no en un psiquiátrico o valorar si es necesario nombrar tutor a las personas mayores debido a la pérdida de memoria.
En definitiva, que no están hablando ni de números ni de estadísticas. Se trata de atender a pacientes, personas que necesitan un trato especializado, cercano y muy humano. Personas portadoras de una gran mochila de sufrimiento detrás. El sindicato LAB apoya al colectivo de forenses en sus reivindicaciones y secunda las movilizaciones que se vayan a convocar.