Las trabajdoras de la marca Urban Sons se han concentrado delante de la puerta de la tienda de Iruñea, que ahora se llama Denin and Friends, para denunciar su situación.
Hace dos semanas que la empresa Urban Sons comunicó a la plantilla el cierre de las 3 tiendas que esta marca navarra tiene en la Comarca de Iruñerria (Avenida Carlos III, Morea e Itaroa). La sorpresa fue cuando precisamente el primer día del periodo de consultas del ERE de extinción de contratos, dos de las tres tiendas abrían sus puertas con otras trabajadoras, a pesar de mantener la misma actividad laboral: venta de ropa y accesorios.
Las trabajadoras de estas tiendas, todas ellas mujeres, que se encuentran en la situación de no tener trabajo, tienen que escuchar cómo su puesto de trabajo ha desaparecido, mientras la tienda funciona con otro nombre, pero sigue utilizando el mismo mobiliario, las mismas perchas, los mismos maniquíes e incluso el mismo felpudo de entrada dado la vuelta.
La situación injusta en la que se encuentran es intolerable. El dueño de la empresa Urban Sons, que también es dueño de la constructora Banur, además de negar la sucesión de empresas, niega también las indemnizaciones por despido que las trabajadoras debieran percibir, obligándoles a acudir a Fogasa.
Es una situación intolerable, que a pesar de que la ley permite, es evidente que el dueño de esta marca, de haber querido, podría, por un lado, haber negociado el traspaso de la marca para que las trabajadoras siguieran en sus puestos de trabajo, o, de quererlo también, abonar las indemnizaciones que por despido marca la ley, a través de otras de las empresas de las que es dueño.
Las trabajadoras seguirán movilizándose por sus puestos de trabajo, que existen pero se les niega. Para LAB no es aceptable la impunidad con las que los empresarios pueden cometer todo tipo de fechorías, sin que leyes, gobiernos ni tribunales hagan justicia ante los abusos que la clase trabajadora acaba padeciendo.