La Direccion no responde una pregunta sencilla: por que una empresa con decenas de millones de beneficios no puede garantizar el poder adquisitivo de su plantilla? Y por que quiere establecer un modelo de trabajo discriminatorio de 12 horas sin necesitarlo?
En los últimos días se han incrementado las presiones desde muchos ámbitos hacia los trabajadores y trabajadoras de MERCEDES para condicionar el referéndum de mañana, día 18. Sin embargo, LAB considera que es la Dirección de MERCEDES la que debe dar explicaciones: Después de llegar a los 62 millones de euros en beneficios en 2021, ¿por qué no puede garantizar el poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras? Repartiendo 265 millones de euros en dividendos, ¿cómo quieren implantar un nuevo modelo laboral discriminatorio, trabajando 12 horas?
La conclusión a la que llegamos es clara: no es un problema económico. La cuestion es otra, la empresa quiere chantajear a la plantilla: las inversiones a cambio de perder poder adquisitivo y mantener la discriminación. Pero las inversiones no dependen ni pueden depender del empeoramiento de las condiciones laborales de la plantilla. Para hacer una fábrica del siglo XXI se necesitan las condiciones laborales del siglo XXI.
Como la respuesta de la plantilla ha sido contundente, las presiones se están multiplicando, además de la de la empresa, desde algunos sindicatos, instituciones,… Por eso LAB quiere preguntar directamente a estos sindicatos e instituciones, lideradas por Urkullu: ¿por qué admiten tan fácilmente que los trabajadores y trabajadoras tienen que perder poder adquisitivo? ¿Qué mensaje envían a la sociedad, sobre todo a la juventud, si dan por bueno que las nuevas contrataciones deben cobrar menos, tanto en el nuevo modelo laboral como en el actual? ¿Se situa a los trabajadores y trabajadoras y su salud en el centro trabajando 12 horas de trabajo en las lineas?
Al mismo tiempo, queremos rechazar las amenazas de los últimos días: la que difundió públicamente el Director de la empresa y tambien las que trasladan los mandos al personal, sobre todo a eventuales, dentro de la planta, con el fin de distorsionar el referéndum. Asimismo, queremos denunciar que se ha impedido a representantes sindicales realizar su labor sindical, dificultando la información a la plantilla.
Por todo ello, LAB quiere aplaudir la lucha de los trabajadores y las trabajadoras de MERCEDES y ofrecer su alternativa: votar no en el referendum con conviccion e ilusion, abordar nuevas movilizaciones y retomar la negociación para que en el acuerdo definitivo se responda a las demandas de la plantlla, entre otras cosas garantizar el IPC, humanizar el nuevo modelo de trabajo y consensuar criterios objetivos para la contratacion y la conversion de contratos en indefinidos, con el fin de acabar con la discriminación de colectivos y desterrar cualquier sospecha de favoritismo; todo ello perfectamente asumible para la empresa.