LABek Italiako USB sindikatuaren kongresuan parte hartu du

En primer lugar quiero agradecer en nombre de mi sindicato LAB, del País Vasco, la invitación de USB para participar en el I Congreso de vuestro sindicato. LAB y USB somos dos sindicatos hermanos que compartimos una misma ideología y apostamos por un sindicalismo de clase, sociopolítico y de confrontación. Por eso, ambos estamos afiliados a la Federación Sindical Mundial (FSM), y por eso nos apoyamos mutuamente. Así, por ejemplo, el pasado 30 de mayo se llevó a cabo una Huelga General en el País Vasco, que recibió el apoyo de USB y del resto de centrales sindicales aquí presentes hoy; igualmente, el pasado 17 de mayo organizamos en el País Vasco, en Bilbao, una conferencia sobre la crisis capitalista a nivel mundial y en Europa, en colaboración con la fundación CESTES, en la que intervinieron Luciano Vasapollo y James Petras.

LAB es uno de los mayores sindicatos del País Vasco. Formamos parte de la izquierda independentista de nuestro país y estamos presentes en todos los sectores de la economía. Tenemos especial fuerza en sectores como la industria, la administración o la enseñanza.

El motivo de la Conferencia de hoy es la “Negociación colectiva en la fase de crisis capitalista”, e intentaré centrarme en ello durante mi intervención:

La crisis capitalista se está utilizando en toda Europa, y especialmente en la Unión Europea, como excusa para destruir totalmente el modelo de relaciones laborales y el modelo social, para instaurar el capitalismo màs salvaje. Una tras otra, se nos imponen diferentes reformas, todas ellas con efectos perversos para la clase trabadora: retraso de la edad de jubilación, abaratamiento del despido, reformas laborales que aumentan la precariedad, privatización de la sanidad y de la educación, etc.

En este momento, debido al asunto que nos ocupa, nos detendremos en la reforma laboral y de negociación colectiva que se ha llevado a cabo en el Estado español recientemente.

En primer lugar, hay que decir que es una reforma laboral que se ha impuesto de forma totalmente antidemocrática en el País Vasco, porque la clase trabajadora vasca y otros sectores populares (estudiantes, pensionistas, etc.) y los sindicatos mayoritarios en el País Vasco (entre ellos LAB) nos hemos opuesto a ella con diferentes movilizaciones (la última, la Huelga General del pasado 30 de mayo), pero el gobierno español la ha impuesto contra nuestra voluntad.

Dado que la realidad, no sólo política, sino también económica, social y laboral y sindical es totalmente diferente en el País Vasco, porque los sindicatos pactistas y españoles CCOO y UGT sólo tienen un 30% de representación en nuestra tierra, LAB y los sindicatos vascos llevamos años reclamando un Marco Vasco de Relaciones Laborales y Seguridad Social, que nos permita decidir en estos temas en el País Vasco. Esta es una reivindicación permanente nuestra.

Además, esta reforma es totalmente favorable a la patronal, porque supone un desequilibrio total en las relaciones laborales a favor de la patronal. Facilita hasta el extremo y abarata el despido y anula el derecho a la negociación colectiva.

Hasta el momento, las empresas, para seguir manteniendo sus cotas de beneficio, han destruido principalmente el empleo. Las tasas de desempleo han llegado a ser insostenibles (26,6% en el Estado español; 17,5% en el País Vasco, cuando hace sólo 4 años era del 6%). Ahora, con esta nueva reforma pretenden rebajar los salarios y empeorar las condiciones laborales de las y los trabajadores.

Esta reforma supone la destrucción total de los ámbitos de y el modelo de negociación que teníamos hasta el momento en el País Vasco o Euskal Herria, por varias cuestiones:

1.- Se limita la ultractividad de los convenios a un año. Es un grave ataque a las reglas de juego de la negociación colectiva. La ultractividad es la garantía legal por la que un convenio mantiene su aplicación hasta su sustitución por otro, evitando así vacios de regulación.

Esta limitación es la que ha hecho que la mayoría de los convenios provinciales del País Vasco vayan a dejar de estar en vigor el próximo 7 de julio. En caso de no negociar un nuevo convenio se aplicará el convenio estatal análogo, o en su defecto, el Estatuto de los Trabajadores.

Esto conlleva consigo, que empeoren los salarios y las condiciones laborales, ya que los convenios a nivel del Estado español tienen en general peores condiciones laborales que los que existen en el País Vasco. En definitiva una mayor desregulación y mayor conflicitvidad en las relaciones laborales

2.- Nuestro modelo de negociación colectiva, se ha venido estructurando con carácter general, en el ámbito provincial. Convenios que allí donde la correlación de fuerzas lo ha permitido, han sido mejorados en el ámbito de la empresa. Ambito que en ningún caso podía empreorar el provincial.

Este modelo de negociación, ha sido atacado por arriba, por los convenios estatales y por abajo, por la preferencia aplicativa que se da a las empresas.

3.- Se facilita el “descuelgue salarial”. El “descuelgue salarial” es la posibilidad que se le da a la empresa de inaplicar, casi de manera unilateral, mediante un arbitraje obligatorio, lo pactado entre ambas partes. Pierde valor el acuerdo.

La negociación colectiva regula las condiciones salariales y laborales de las y los trabajadores. Es por tanto un instrumento de reparto de riqueza y de mantenimiento de empleo. Una herrramienta principal en la acción sindical para la defensa colectiva de los derechos de las y los trabajadores.

Más si cabe, en un país como el nuestro, que carece de competencias en el ámbito sociolaboral. Si bien es cierto, que para poder neutralizar en su totalidad, los efectos de las reformas que se nos imponen desde España necesitamos plenas competencias (Marco Vasco de Relaciones Laborales y Protección Social), no es menos cierto que la negociación colectiva puede jugar un papel muy importante a la hora de minimizar esos efectos.

Es por ello, que LAB desde el principio, ha defendido el marco propio de negociación colectiva., para defender nuestro ámbito de negociación. Esto pasa por defender los convenios provinciales con prevalencia frente al convenio estatal y por neutralizar los efectos más perversos de la reforma laboral, luchando en los convenios provinciales y en las empresas.

La reforma laboral que se ha llevado a cabo en el Estado español ha roto el poquísimo equilibrio que existía en las relaciones laborales, en perjuicio de la clase trabajadora. La posición patronal es de comodidad, de soberbia. Están manteniendo las negociaciones bloqueadas para conseguir mejorar su posición ante el abismo que puede suponer que llegue el 7 de julio sin ningún tipo de acuerdo vinculante que garantice que se mantendrán los convenios colectivos provinciales ya existentes, por lo menos hasta que se firmen otros que los sustituyan.

Cambiar está actitud sólo será posible gracias a nuestra lucha y determinación, gracias a la conflicitividad que seamos capaces de generar. Luchar contra la reforma laboral, va a ser una pelea díficil y constante en el tiempo, pero en el País Vasco hay base sólida para ello, tal y como demostró la Huelga general que el pasado 30 de mayo protagonizamos LAB y otros sindicatos vascos, y a la que se opusieron los sindicatos españoles CCOO y UGT, que una vez más optaron por colaborar con los empresarios.

Además de la Huelgas Generales (en el País Vasco hemos hecho ya 6 huelgas generales en los últimos 4 años), estamos realizando decenas de manifestaciones y huelgas sectoriales. Por ejemplo, el pasado 24 de mayo hubo una huelga sectorial en el metal en la provincia de Gipuzkoa en defensa del convenio provincial en la que paró más del 80% del sector, tal y como reconoció la propia patronal. Asimismo, en junio habrá nuevas huelgas en el sector del metal.

Desde LAB creemos que la lucha es el camino, también en la negociación, para conseguir unas condiciones laborales lo más beneficiosas posibles para la clase trabajadora. El capitalismo y la Troika nos están intentando arrebatar todo, también los derechos sociales, laborales y sindicales, y por eso es esencial luchar por mantener el derecho a negociar colectivamente nuestras condiciones laborales, a fin de unir fuerzas y lograr ante las patronales una mejor posición.

Para ello es muy importante también el trasvase de información entre los sindicatos europeos y, en la medida de lo psoible, coordinar nuestras reivindicaciones y nuestras luchas.

Este seminario de hoy puede ser un primer paso en positivo para reforzar esa coordinación entre los sindicatos que aquí estamos, con la ayuda de la FSM.

Igor Urrutikoetxea (Miembro del Comité Ejecutivo del sindicato LAB, País Vasco)
 

In the first place I would like to thank in the name of my trade union, LAB, from the Basque Country, the invitation from the USB to participate in 1st Congress of your trade union. LAB and USB are two brother trade unions who share the same ideology and commit to a class-based, socio-political and confrontational trade unionism. For that, both of us are affiliated with the World Federation of Trade Unions (WFTU), and for that we mutually support each other. For example, this past May 30th a General Strike was carried out in the Basque Country, which received the support of the USB and the rest of the trade unions present here today; equally, this past May 17th we organized in the Basque Country, in Bilbao, a conference about the worldwide and European capitalist crisis in collaboration with the CESTES Foundation, in which Luciano Vasapollo and James Petras participated.

LAB is one of the largest trade unions in the Basque Country. We form a part of the pro-independence left in our country and we are present in all sectors of the economy. We are especially strong in sectors such as administration, industry and education.

The motive of today’s Conference is “Collective Bargaining in the Phase of Capitalist Crisis”, and I will try to centre on that in my intervention.

The capitalist crisis is being used in all of Europe, and especially the European Union, as an excuse to totally destroy the model of labour relations and the social model, to install a more savage form of capitalism. One after another, they are imposing different reforms, all of them with perverse effects for the working class: raising the age of retirement, arbitrary firings, labour reforms that increase uncertainty, privatization of health care and education, etc.

At this moment, due to the subject that occupies us, we will detain ourselves on labour reform and collective bargaining that has been carried out in the Spanish state recently.

In the first place, it must be said that it is a labour reform that has been imposed in a totally antidemocratic way in the Basque Country, because the Basque working class and other popular sectors (students, pensioners, etc.) and the majority trade unions in the Basque Country (LAB among them) have been opposed to it with different mobilizations (the latest being the General Strike on May 30th), but the Spanish government has imposed it against our will.

Given that the reality, not just political, but economical, social, labour and trade union, is totally different in the Basque Country because the conciliatory Spanish trade unions CCOO and UGT only represent 30% of the workers in our land, LAB and the Basque trade unions have been demanding a Basque Framework for Labour Relations and Social Security, that would allow us to decide these subjects in the Basque Country. This is a permanent demand of ours.

Also, this reform is totally favourable to management because it supposes complete instability in labour relations in favour of management. It facilitates to the extreme and it makes lest costly the firing of workers and annuls the right to collective bargaining.

Up till now, businesses, to continue maintaining their quotas of benefits, have mainly destroyed employment. The rates of unemployment have come to be unsustainable (26.6% in the Spanish state; 17.5% in the Basque Country, when only four years ago it was 6%). Now with this new reform they try to reduce salaries and worsen the labour conditions of the workers.

This reform supposes the total destruction of the spheres and negotiation that we have had until now in the Basque Country (Euskal Herria, in the Basque language) for various questions:

1.- It is limited to the stability of the agreements to one year. It is a serious attack to the rules of play of collective bargaining. Stability is the legal guarantee so that an agreement maintains its application until its substitution by another, that way avoiding empty spaces of regulation.

This limitation is what has made that the majority of the provincial agreements in the Basque Country will not remain in vigour this coming July 7th. In case of not negotiating a new agreement they will apply the analogous state agreement, or in its defect, the Workers’ Statute.

This will bring with it that salaries and labour conditions will worsen, since the agreements at the level of the Spanish state since labour conditions are generally worse than those that exist in the Basque Country. It is definitely a bigger deregulation and more conflict in labour relations.

2.- Our model of collective bargaining has been structured, in a general character, in the provincial sphere. Agreements where the correlation of forces have permitted it have been improved in the sphere of the company. A sphere that in no case should worsen that of the provincial.

This model of negotiation, has been attacked from above, by state agreements and from below by the applicative preference that is given to businesses.

3.- It facilitates the “lowering of salaries”. The “lowering of salaries” is the possibility given businesses to not apply, almost in a unilateral manner, through obligatory arbitration, what was agreed upon by the parts. The agreement loses its value.

Collective bargaining regulates salary and labour conditions of the workers. It is therefore an instrument for redistributing wealth and of maintaining employment. A main tool in trade union action for the collective defence of the workers.

Even more if possible, in a country like ours, which lacks competencies in the socio-labour sphere. It is true, that to be able to neutralize in their totality, the effects of the reforms that are imposed on us from Spain, we need full competencies (Basque Framework of Labour Relations and Social Protection), it isn’t less true that collective bargaining can play an important role in minimizing these effects.

It is for that, that LAB from the beginning, has defended our own framework of collective bargaining, to defend our sphere of negotiation. This passes for defending the provincial agreements with prevalence facing the state agreement and by neutralizing the most perverse effects of the labour reform, fighting in the provincial agreements and in the businesses.

The labour reform that has been carried out in the Spanish state has broken the little equilibrium that existed in labour relations, in prejudice of the working class. The position of management is one of comfort, of arrogance. They are maintaining the negotiations blocked in order to improve their position before the abyss that July 7th could suppose without any kind of binding agreement that guarantees that guarantees that the already existing provincial agreements are maintained, at least until they sign others that substitute them.

Changing this attitude will only be possible thanks to our struggle and determination, thanks to the tensions and disputes that we are able to generate. Fighting against the labour reform is going to be a difficult fight and constant in time, but in the Basque Country there is a solid base for it, just as was demonstrated by the General Strike that this past May 30th LAB and other Basque trade unions led, and to which the Spanish trade unions CCOO and UGT opposed, who once again opted to side with management.

Apart from the General Strikes (in the Basque Country we have already made 6 in the last 4 years), we are holding dozens of demonstrations and sectoral strikes. For example, this past May 24th there was a sectoral strike in the metal sector in the province of Gipuzkoa in defence of the provincial agreement which shut down more than 80% of the sector, just as management itself recognised. Also, in June there will be new strikes in the metal sector.

From LAB we believe that the struggle is the way, also in negotiation, to achieve the most beneficial labour conditions possible for the working class. Capitalism and the Troika are trying to take away everything, also social, labour and trade union rights, and for that it is essential to fight to maintain the right to collectively bargain our labour conditions with the end of uniting forces and achieving a better position before management.

For that it is also very important the transfer of information among European trade unions and, as far as possible, to coordinate our demands and struggles.

This conference today can be a first positive step to strengthen this coordination the trade unions that are here, with the help of the WFTU.

Igor Urrutikoetxea (Member of the Executive Committee of the trade union LAB, Basque Country)