Conscientes de la importancia de las próximas elecciones autonómicas y ante la gravedad de la situación, LAB como sindicato sociopolítico, apela a todas las fuerzas políticas y en particular a aquella que vayan gobernar en los próximos 4 años a dar marcha atrás al desmantelamiento progresivo y meditado de la sanidad pública.
La mala praxis del actual Gobierno Vasco y gobiernos anteriores han llevado a la Sanidad Pública a un deterioro evidente. El Departamento de Sanidad funciona bajo parámetros de gestión empresarial, provocando como resultado la percepción social de insostenibilidad del sistema público, usándolo como excusa para recortar en personal y servicios y abrirse así al libre mercado. Aspectos tan importantes como la transparencia y la participación se convierten así en una quimera y por supuesto, el diálogo y la negociación con la parte social son otra ilusión.
La salud es un derecho fundamental y un instrumento fundamental para el reparto de la riqueza y en ese reparto debemos caber todas las personas que vivimos en EuskalHerria, sea cual sea nuestra procedencia, arraigo o situación de salud. Nuestra sociedad necesita un sistema de salud cercano y participativo, transparente, de calidad, eficiente, gratuito y universal. Por ello, y desde nuestro trabajo en el sector sanitario, exigimosa los partidos políticos y especialmente a aquellos que próximamente tengan responsabilidades de gobierno el cumplimiento de unos mínimos que consideramos imprescindibles.
. Promocionar una gestión sanitaria alejada del actual concepto mercantilista de salud, garantizando los derechos individuales y colectivos. Desaparición de los actuales contratos-programa, porque abre la puerta a la privatización de los servicios públicos.
. Readecuar el actual mapa sanitario en todos los territorios según las previsiones de crecimiento demográfico y de las necesidades socio-sanitarias. Así mismo, deben preverse los perfiles profesionales necesarios en el sistema sanitario a corto y medio plazo, garantizando la atención en toda su integridad.
. Democratización del sistema sanitario e impulsar la participación de la ciudadanía y de las personas trabajadoras del sector son elementos fundamentales para un buen desarrollo y gestión del sistema sanitario. Se debe colocar a la sociedad y a los profesionales en el centro del sistema siendo un objetivo prioritario la motivación y la implicación de los profesionales. Al hilo de esto, se deben eliminar los puestos de libre designación y someter todos los contratos a criterios objetivos del perfil requerido y al control público, con la posibilidad de ser rescindidos en cualquier momento.
. Redimensionar la Atención Primaria en todos sus aspectos, al ser esta la base del sistema sanitario y el garante de la promoción de la salud y la prevención de enfermedades de la población.
. Garantizar un sistema sanitario euskaldun que respete todos los derechos lingüísticos de las personas usuarias de Osakidetzaen todos los niveles asistenciales.
. Garantizar la formación continuada (reciclaje profesional) para todos los trabajadores del sector, así como fomentar la investigación multidisciplinar.
. A nivel sindical abrir espacios para la negociación colectiva con las personas representantes de las trabajadoras y trabajadores, actualmente cerrados en la Mesa Sectorial.
. Revertirse el empeoramiento de la calidad asistencial, poniendo fin a los recortes continuos de las condiciones de trabajo, a las abusivas cargas y a la disminución de los recursos, con las siguientes medidas organizativas:
– Realizar un estudio de las cargas de trabajo, adecuando así las plantillas a las necesidades y garantizando el mantenimiento de estas también durante los periodos vacacionales.
– Eliminar las horas extras que pervierten el sistema mediante peonadas, autoconcertación, e invertir esos fondos en nueva contratación.
– Eliminar el actual sistema de guardias y aplicar, como norma general, a todas las categorías el trabajo a 3 turnos.
– Eliminar la posibilidad de trabajar a la vez en la sanidad pública y en la privada.
– No privatizar y revertir gradualmente a lo público todo lo privatizado.
– Eliminar los incentivos al personal directivo.
– Replantear el actual sistema de OPE y habilitar mecanismos más ágiles para el acceso al sistema sanitario.
– Replanteamiento de la carrera profesional al tratarse de un complemento dependiente de la valoración subjetiva de las jefaturas y basado únicamente en incentivos salariales.
– Mantener todos los hospitales existentes para pacientes agudos, entre ellos el Hospital Santiago de Gasteiz y redimensionar las camas hospitalarias según la actividad y las necesidades demográficas.
– Reducción real de las listas de espera, mediante el aumento de la contratación y la reorganización de servicios.
– Promocionar un hospital comarcal público en Tolosaldea.
– Dotar de nuevas especialidades al hospital de Leza y convertirlo en centro de referencia de Rioja Alavesa.
– Culminar el nuevo hospital comarcal de Urduliz (margen derecha)
– Poner en funcionamiento del hospital de Gernika como hospital comarcal
– Reorganizar y actualizar las Redes de Salud Mental de la CAV.
– Racionalización del gasto farmacéutico,eliminando el poder de influencia en la Investigación y práctica clínica de las multinacionales farmacéuticas.