En la práctica diaria de nuestro sindicato, nos percatamos de la realidad social que se vive en Bizkaia. Los procesos de precariedad y pobreza que se han llevado a cabo durante estos últimos años no han hecho más que aumentar la desigualdad social; como demuestran los indicadores (Eustat, diferentes agentes sociales,…), la precariedad social ha aumentado mucho en nuestra sociedad.
En este sentido, y según los datos que manejamos, se han encendido todas las alarmas, y a nuestro entender, las políticas llevadas a cabo por la Diputación de Bizkaia hasta hoy día no han logrado hacer frente a semejante problema.
Creemos que se deben subrayar tres ideas:
1.- La situación del empleo es muy preocupante. Por una parte, la tasa de paro es alta, entorno al 17%. Nos preocupa sobremanera la situación de las comarcas de Bilbao, Ezkerraldea y de Enkarterria, donde dicha tasa se sitúa por encima del 20%.
Aún siendo cierto que durante los últimos meses el empleo ha aumentado, el empleo creado es muy precario. Dicha tendencia apunta que la pobreza y la precariedad se perpetuarián, tanto si hubiese trabajo como si no. Los contratos temporales, los parciales o las políticas de empleo basadas en salarios bajos no sirven (cabe recordar que hace poco, el señor Urkullu afirmó que los salarios de 800-1000 euros no son salarios dignos). Por consiguiente, en muchas ocasiones tener un trabajo no es suficiente para poder llevar adelante una vida digna. Se está creando, también, una bolsa de marginación entre las personas trabajadoras que tienen un trabajo precario.
2.- Esta situación es aún más grave en el caso de las personas sin empleo de larga duración: Tiene una de las mayores tasas de Europa. Esto resulta inaceptable e insoportable. Ello tiene tres consecuencias:
• Hoy en día somos muchas las personas trabajadoras que no disponemos de ninguna protección económica y que de cara al futuro no tenemos oportunidad alguna para conseguir una pensión digna.
• La demanda de rentas de garantía de ingresos económicos aumenta. De todas maneras, esta renta es una débil ayuda, puesto que como indican las estadísticas (según el Eustat, no ha echo más que aumentar desde el año 2008 hasta el 2014), no ayuda a superar la grave situación de pobreza.
• Además, debemos tener en cuenta que debido a las duras condiciones del censo hay gente que no tiene ninguna protección.
3.- Durante los últimos años, a pesar de que las situaciones y las necesidades hayan aumentado, los gastos sociales no han crecido en la misma proporción; ello ha traído consigo un subdesarrollo de los servicios y de las prestaciones sociales, tanto cuantitativa como cualitativamente.
Para LAB las políticas llevadas a cabo hasta hoy han mostrado sobradamente sus limitaciones y sus incapacidades para volcar esta grave situación social. Por ello, requerimos a la Diputación bizkaina a que tome las siguientes medidas:
a) La diputación debe ser un agente activo a la hora de generar, impulsar y repartir empleo. Para ello reclamamos medidas concretas: impulso de las cláusulas sociales, ultractividad de los convenios, limitar la temporalidad, cuidar la salud de las personas trabajadoras y garantizar la igualdad,…
b) Vemos necesario que se reparta de una manera justa y solidaria la riqueza que se genera en Bizkaia. Para ello, requerimos que se transforme el actual modelo fiscal en un modelo más progresivo, para que los y las que más tienen pagan más.
En este sentido, pensamos que debe aumentarse el gasto social en los presupuestos de 2016. Así, se debe hacer frente a las restricciones que se han dado en los servicios sociales y de dependencia, ofreciendo los servicios que necesitan y merecen los y las habitantes de Bizkaia.
c) Para finalizar, siendo este un Departamento al que compete la igualdad, y teniendo en cuenta que la cara más dura de pobreza y precariedad la sufren las mujeres, proponemos a la Diputación de Bizkaia redacte una norma foral sobre igualdad. Entre otras, hacen falta medidas dirigidas a garantizar el cuidado digno y universal de todas las personas para superar la opresión y las diferencias de género.