Consideramos un atropello lo que estos sindicatos están haciendo, llevándose las negociaciones de las condiciones laborales de los y las trabajadoras de Navarra a Madrid, imposibilitando así cualquier revindicación o incidencia en donde trabajamos y vivimos, en Navarra.
Desde LAB consideramos que este convenio va en contra de los intereses de las trabajadoras de colectividades por dos cuestiones principalmente:
Se llevan la negociación de Navarra a Madrid, queriendo evitar que las trabajadoras navarras tengamos ninguna incidencia en las negociaciones del convenio.
Porque, a parte del título, han hecho un corta y pega del convenio de hostelería, no reconociendo las especifidades de las trabajadoras del sector. Y para eso, ya tenemos el convenio de hostelería.
Las trabajadoras de colectividades, siempre lo hemos dicho, no somos ni camareras ni cocineras al uso. Desempeñamos trabajos dentro de educación y sanidad, y como tal debieran ser reconocidos.
Por este motivo, LAB está de acuerdo en que las trabajadoras de colectividades salgamos del convenio de hostelería y se nos reconozcan, de una vez, las funciones que realizamos, y dicho sea de paso, se nos exigen: educadoras, asistentes, cocineros/as de dietas especiales….
Pero este reconocimento no debe quedarse en el título del convenio, sino que debe ser reconocido en sueldo y jornada.
Nuestra revindicación es clara: un convenio de colectividades de Navarra en el que la jornada sea la misma que en la administración, y los sueldos sean equiparables a los puestos de trabajo en sanidad y educación.
Esta revindicación es posible, y así lo consiguieron en el País Vasco, un convenio de colectividades con una jornada de 1592 horas anuales y un sueldo 18% superior.
Esta debe ser la revindicación de los sindicatos en Navarra, porque un convenio de Colectividades en Navarra es posible. Solamente es necesaria la voluntad de UGT y CCOO, que se han llevado la negociación a Madrid, para poder volver a negociar aquí.