El pasado 4 de octubre, el Grupo de construcciones aeronáuticas de primer nivel TIR-1 Alestis aerospace actualmente en situación de intervención concursal con 11 plantas repartidas entre Brasil, Andalucia y Vitoria y con una plantilla de 1800 personas, presento un Plan de Viabilidad en Sevilla, a resultas del cual pretenden despedir a 329 trabajadores y trabajadoras de sus 9 plantas en el Estado Español: siete en Andalucia (Cadiz y Sevilla), y dos en Vitoria- Gasteiz, así como el traslado forzoso de más de 200 trabajadores entre sus plantas principalmente en Andalucia, y la redistribución de los distintos proyectos y cargas de trabajo entre todas sus plantas, y el cierre de una planta en Brasil.
El accionariado del grupo se reparte a día de hoy entre distintas cajas de Andalucia 29,3% (Cajasol y Unicaja), la junta de Andalucia 19,90% ,la empresa estatal EADS 1,85%, el Banco Europeo de Finanzas (BEF) 6,80%, y el grupo empresarial vasco ALCOR socio mayoritario con el 42% de las acciones.
En las plantas de Gasteiz , situadas en Miñano y Jundiz, se pretende despedir a 62 personas de una plantilla de 231 trabajadores, un 27% de sus trabajadores en dos años, 2013 y 2014.
Ante esta pretensión desde el sindicato LAB queremos dar a conocer una primera valoración:
En primer lugar, creemos que la situación actual de la empresa es consecuencia de una nefasta GESTIÓN EMPRESARIAL, en la que se han mezclado desavenencias personales entre los principales accionistas, una mala planificación, la falta de financiación económica suficiente para soportar los proyectos en curso y previstos, y UNA SUBORDINACIÓN por parte de los accionistas mayoritarios a compromisos políticos con terceros de la Junta de Andalucia, difíciles de cumplir en cuanto a sustento de carga de trabajo , recursos económicos y dimensión de plantillas, y plantas en Andalucia. Un cumulo de situaciones de las que los y las trabajadores ,no somos responsables.
Según parece, llevarse proyectos rentables y con futuro de aquí a otros lugares, disminuir la carga de trabajo y los despidos parece ser más una decisión política que empresarial, que sin lugar a dudas a corto plazo nos puede condenar al cierre. Pero no sabemos realmente qué razones hay detrás de ello, ya que hasta hace 15 días, las plantas de Vitoria eran las únicas rentables del grupo, en palabras del director de programas Juan Calero, y del director general Jesus García Arguelles.
En nuestra opinión, en la empresa, y más concretamente en las plantas de Araba, no sobra nadie y por eso, nos comprometemos a defender firmemente el empleo. Además, instamos a la empresa a mantener la actividad industrial de las plantas, garantizando su futuro. Del mismo modo hacemos un llamamiento al Gobierno Vasco, y a las instituciones locales: Diputación y Ayuntamiento, a que defiendan el futuro de las plantas de Vitoria- Gasteiz y sus empleos, ya que ello supone defender unas empresas en un sector estratégico como el aeronáutico,con una actividad con proyección de futuro que crean un alto valor añadido , y que genera miles de puestos directos e indirectos.
Al hilo de esto, no aceptaremos medidas que supongan salidas traumáticas de la empresa , ni el cierre de sus plantas. Si hay que tomar medidas por la situación puntual actual de la empresa esta ya sabe que antes de los despidos existen otras posibilidades. Más aún cuando se prevé a corto, medio plazo que la situación mejorará en pocos años.
Finalmente desde LAB abogamos porque las negociaciones que afectan a las fábricas de aquí, se negocien en Euskal Herria. Es evidente que si aquí vivimos, aquí trabajamos, aquí tenemos que poder decidir. Siendo por tanto necesario la apertura de una mesa de negociación aquí en Araba.