Hoy, 7 de noviembre, E.V.A. trabajador de 57 años de la empresa GOIZ LAN S.L, ha fallecido en un nuevo accidente laboral mortal en Ordizia, al caerse de un andamio, en una nueva construcción de viviendas.
Desde el sindicato LAB queremos mostrar nuestro apoyo y solidaridad con sus familiares, allegados y la clase trabajadora.
En lo que llevamos de 2012, al menos 52 trabajadores y trabajadoras han fallecido en sus puestos de trabajo. Estos accidentes mortales parecen crecer en paralelo a la dejación de la administración y los empresarios por evitar esta continua sangría. La falta de medidas contundentes, la inmunidad absoluta de los empresarios, unido a una política de explotación neoliberal solo puede producir muerte y miseria. Una vez más se ha producido la muerte de un trabajador en la construcción, donde la precariedad, la explotación, las jornadas interminables, las faltas de medidas de seguridad, los ritmos y las precarias condiciones de trabajo matan; al parecer este último accidente ha ocurrido en una empresa donde presuntamente se dan irregularidades e incumplimientos de la normativa laboral.
Más allá de las medidas que empiezan y acaban en campañas publicitarias como las que realizó la administración de la CAPV en el mal llamado “diálogo social”, como puede ser la campaña “LOTU”, una vez más se observa su ineficacia y sus resultados lamentablemente con los accidentes en construcción ocurridos los anteriores años así como este ocurrido hoy en Ordizia.
Y por eso, como trabajadores y trabajadoras tenemos que manifestar nuestra TOLERANCIA CERO con los accidentes de trabajo, las enfermedades profesionales y las enfermedades relacionadas con el trabajo. Debemos impulsar y acompañar el cambio de modelo, un cambio político, económico y social, en el que nuestro DERECHO a la SALUD sea una realidad y no una utopía.
Y ese cambio no está en Gasteiz o Iruñea o Baiona, no está en Madrid o Paris, no nos lo van a regalar la patronal o las leyes, el cambio está en cada uno de nosotros y nosotras, está en nuestro compromiso, en cada fábrica, en cada pueblo y cada barrio.