LAB critica el proceso de negociación del convenio de residencias de bizkaia por su opacidad y los contenidos por incompletos y anuncia que exigirá una reunión al Diputado General de Bizkaia, José Luis Bilbao, por lo que entiende como una actitud de desprecio de esta institución respecto a una gran parte de las y los trabajadores del sector.
LAB CRITICA EL PROCESO DE NEGOCIACIÓN DEL CONVENIO DE RESIDENCIAS DE BIZKAIA POR SU OPACIDAD Y LOS CONTENIDOS POR INCOMPLETOS
Anuncia que exigirá una reunión al Diputado General de Bizkaia, José Luis Bilbao, por lo que entiende como una actitud de desprecio de esta institución respecto a una gran parte de las y los trabajadores del sector
Con esta rueda de prensa no se trata tanto de hacer pública nuestra posición en relación al recientemente firmado convenio de residencias de Bizkaia (en tanto que ya el pasado viernes materializamos nuestra firma), como de compartir la lectura enormemente crítica del sindicato LAB en relación a las formas acontecidas en este proceso de negociación, y en relación a las oportunidades que como consecuencia de la posición del sindicato mayoritario ELA hemos perdido en el camino.
Este acuerdo se ha hecho primero sin ninguna posibilidad de lucha intersindical por la actitud de ELA (que no hay que olvidar que tiene el 60% de representatividad y por lo tanto su participación determina absolutamente todo) que puso a esta negociación condiciones sine qua non previas inasumibles por el resto de sindicatos, pero a los que posteriormente y para nuestra sorpresa ELA también ha renunciado. Y es que ELA planteaba que no era suficiente la firma de un convenio sectorial sino que el mismo debía ser refrendado paralelamente residencia por residencia, cuestión que además planteaba como condición sine qua non para acordar una plataforma conjunta y abordar cualquier dinámica movilizadora conjunta.
Acto seguido nos enteramos de que de espaldas a la representación legal de las trabajadoras del sector, ELA ha negociado al estilo DFB (PNV)-ELA-Patronal, modelo de negociación que creíamos ya superado, y nos enteramos de que existe ya un preacuerdo a tres bandas en el contexto de la última mesa de negociación en la que se nos dice “esto es lo que hay”, ELA firma y al resto de sindicatos se nos da un plazo de cuatro días para sumarnos a este acuerdo, con el añadido de que ni tan siquiera disponemos de la literalidad del acuerdo cerrado con el PNV-DFB en relación a los pliegos de condiciones (pese a haberlo solicitado formalmente).
Esto nos ha sorprendido por parte de ELA. Primero, porque en este acuerdo no se recoge aquello que supuso un obstáculo para un planteamiento intersindical (la condición de refrendo de dicho acuerdo residencia por residencia), con lo cual nos da la sensación de que era una condición que se planteaba no a la patronal, ni una condición para garantizar la aplicación efectiva del convenio como tantas veces han pretendido argumentar, sino una condición para evitar la lucha intersindical; y segundo, porque pensábamos que el modelo ELA-PNV-Patronal de negociación de despacho estaba ya superado.
Nos sorprende aún más cuando en el caso de esta misma negociación en el territorio de Gipuzkoa, con una Diputación que tras tratar con toda la representación sindical puso sobre la mesa el dinero suficiente para materializar un acuerdo en el que se recogían condiciones laborales demandadas históricamente en este sector además del blindaje y las medidas anti-reforma correspondientes. En este caso, ELA no varió su posición inicial, cuando hubo una oportunidad por parte de una de las patronales para entrar a firmar el convenio sectorial si se hubiera retirado esa condición.
Siendo esto grave por parte de ELA en tanto que confunde “nagusitasuna” con “nagusikeria”, y no hace un uso apropiado de esa amplia mayoría con la que cuenta, para desde el liderazgo pero desde la unidad de acción conseguir una mayor y mejor correlación de fuerzas, y mejores condiciones para luchar; por parte de la Diputación Foral de Bizkaia nos parece intolerable.
Ese ninguneo y esa falta de respeto a la que la Diputación Foral de Bizkaia, dirigida por el PNV, ha sometido no ya a este y otros sindicatos, sino sobre todo a todas esas trabajadoras que se sienten identificadas y representadas por los mismos, es algo inaceptable por parte de una institución que dice representar a toda la ciudadanía de su territorio. Es sencillamente intolerable.
¿Acaso debemos entender que esta Diputación sólo tiene en cuenta a los trabajadores que representa ELA? ¿Es que el resto de las trabajadoras no se merecen ser escuchadas y atendidas por parte de Jose Luis Bilbao? Es algo repito, tan intolerable, que no podemos permitir que se repita y anunciamos que vamos a solicitar una reunión con el mísmisimo Diputado General para trasladarle nuestro enfado, que nos dé las explicaciones que entienda oportunas, y a partir de ahí valorar qué otros pasos dar.
Pero la mayoría de las veces, las formas, si no determinan sí condicionan y en mucho, los propios contenidos del acuerdo y así, pese a haberlo firmado por el valor que en sí mismo tienen las cláusulas de blindaje y anti-reforma, somos muy críticos también con el resto de contenidos del acuerdo.
A pesar de todo lo anterior, LAB ha decidido suscribir el preacuerdo que, a pesar de las formas, cumple con los objetivos principales que este sindicato se había marcado al inicio; no a la reforma laboral, obligatoriedad de aplicación en todas las residencias y mejoras salariales. Sin embargo, tenemos que denunciar que el mismo es susceptible de mejora. Mejora que habría podido conseguirse con el trabajo de todas, de no ser porque el sindicato mayoritario hasta el día de hoy imponía como condición sine qua non el refrendo mediante convenios de empresa del convenio sectorial, restándole obligatoriedad de aplicación al mismo.
De todas formas, nos alegramos de ver que es posible una negociación que vaya de mantener lo que tenemos a mejorar las casos si es que hay voluntad. Y en nuestra opinión, hay mucho que mejorar.
Celebramos pues, que la estrategia de LAB se haya compartido por fin, demostrando así que es posible confeccionar un convenio sin reforma laboral y blindado ante cualquier descuelgue o inaplicación, también y por lógica, mediante convenio sectorial en Bizkaia, siendo la norma aplicable para todas. Y es que, fue reivindicación de este sindicato desde el principio, tanto la defensa de la negociación a nivel del territorio, como no dejar entrar a la reforma en un sector de por sí precarizado, así como la eliminación de obligatoriedad del arbitraje en cualquier instancia. Lamentamos, en este sentido, que en esa estrategia del "sálvese quien pueda" se hayan firmado convenios que ya quedan, de facto, por debajo del IV. Convenio Sectorial para Centros de la Tercera Edad de Bizkaia. SAMSIC, contrata de una de las residencias de referencia de Bilbao, es ejemplo de ello, ya que además de sufrir una fuerte desigualdad causada por la subcontrata, está ahora, gracias a la reforma que reordena la prioridad aplicativa y a quienes han firmado ese convenio de centro vendido como panacea, por debajo del sectorial en varios aspectos.
A pesar de todo, nos alegra comprobar que cuando hay voluntad, se puede pasar de negociar sobre lo que ya se tiene, a lo que está por mejorar. Y para mejorar, a nuestro juicio, hay mucho.
Para las delegadas de este sindicato es un verdadero atropello la congelación de un salario que no reconoce la labor social que desempeñan ellas y quienes son representadas por ellas. De hecho, al renunciar al menos al IPC del 2012 de la CAV, que fue de 2,7, las empresas amortizan las subidas que se prevén para 2014 y 2015, instauran una diferencia para con las condiciones económicas, que suponen una subida de 3,2 en total, de casi el doble.
También que las mejoras sociales se limiten a 4 horas de libre disposición, aumento de tiempo de la excedencia por cuidado de hija o hijo, o acumulación de reducción de jornada en días o semanas, también en los casos en los que sea por cuidado del o de la menor. Tal es así, que nosotras queremos dejar claro, que lamentamos no haber tenido oportunidad de incidir de lleno en la regularización del sector y de las condiciones de las que en él trabajamos, así como, en las ratios y la contratación, Salud Laboral, Igualdad, Formación y Euskara. Y por supuesto, hay que tener en cuenta que demandas históricas que dignifiquen los puestos de trabajo de quienes vivimos día en estos centros hayan quedado en el camino. Ejemplo de ello son, licencias retribuidas para sectores con características tan específicas, descanso acorde con la labor desempeñada, diario y mensual, la compensación del total del salario en caso de baja laboral, reconociendo así la incidencia del tipo de trabajo en la salud de sus trabajadoras, etc.
En conclusión, son muchos los aspectos que nos hemos dejado a un lado en este escenario, aspectos muy importantes que regularían un sector conformado por mujeres que por haber sido privatizada su tarea, colaboran con lo que a nuestro juicio son “lobbys” de grandes empresas que mercadean con los derechos sociales. Es decir, que aunque se blinda la reforma, se garantiza la aplicación del convenio sectorial y hay mejoras salariales, este preacuerdo nos resulta mejorable en cuanto a su estricto contenido se refiere.
Por ello, LAB invita a las trabajadoras a participar en los actos que sus delegadas llevarán a cabo estos días y semana; asambleas por los centros, lucha por abordar de manera íntegra y urgente la revisión de las ratios, y en definitiva, los actos por la dignificación de un sector que será, servicio público y de calidad gracias a la lucha de las trabajadoras del sector.
Bilbao, 8 de abril de 2014