Últimamente han sido constantes los recursos y resoluciones jurídicas contra los perfiles lingüísticos de los puestos de trabajo, cuando estos constituyen uno de los ejes principales del proceso de euskaldunización de la Administración Pública.
La Diputación Foral de Gipuzkoa tampoco se ha librado de estos ataques que se están produciendo en toda la CAV, tal y como evidenció en su día lo ocurrido en Uliazpi. Por ello, trabajadores y trabajadoras de la Diputación se han movilizado ante el juzgado de Donostia, en un momento en el que estamos en la antesala de un nuevo ataque jurídico. Esta vez se trata del juicio contra los Perfiles Lingüísticos de los puestos de cuidador o cuidadora.
Poner freno a esta ofensiva jurídica que va a más constantemente es una responsabilidad que compete a la clase política vasca, adaptando la Ley de Euskera o readaptando el nuevo Decreto de Perfiles Lingüísticos recién reformulado.
Personas expertas han planteado una serie de propuestas, como por ejemplo, la solución puesta sobre la mesa por el jurista Iñigo Urrutia. La clase política vasca no puede mirar hacia otro lado. Debe saber que ante este tipo de ataques jurídicos no basta con llenarse la boca, sino que hay que tomar medidas, ya que de lo contrario la ofensiva no cesará.
Cada cual tiene que asumir sus responsabilidades políticas. LAB tiene claro que le corresponde impulsar medidas para que los trabajadores y las trabajadoras trabajen y vivan en euskera, y a la clase política vasca le corresponde adoptar las medidas legales necesarias para que eso sea posible.