En primer lugar queremos mostrar nuestra solidaridad con la familia y amistades del transportista fallecido el miércoles en el puerto de Pasaia (Gipuzkoa) en accidente laboral. Por otra parte, la mayoría sindical vasca denuncia que tal y como sucede en otros sectores, las condiciones laborales de los y las transportistas son cada vez más precarias. Cabe destacar que muchos de los transportistas vascos son autónomos, pero que una parte del sector también la componen los chóferes. La dejadez con la que la Administración ha tratado al sector durante los últimos años ha hecho que las condiciones laborales tanto de transportistas como de chóferes no hayan mejorado.
Los accidentes laborales que sufren los y las transportistas no se contabilizan muchas veces en las estadísticas oficiales: se ocultan como accidentes de tráfico. En otras ocasiones, y no sólo en el transporte, las administraciones tienden a no tomar en consideración las “muertes naturales” como accidentes laborales, olvidando por completo los efectos que, por ejemplo, el estrés puede acarrear.
Las administraciones disfrazan las precarias condiciones de trabajo en las que está sumergido el sector. Hay que subrayar también que los accidentes laborales que sufren los profesionales transportistas son la consecuencia directa de la más absoluta desregulación del sector, y de la falta total de derechos de los y las transportistas, que para conservar su trabajo se ven obligados a hacer frente a las prisas y a las presiones de las empresas cargadoras, a horarios apretados, cargas con exceso de peso, precios bajos por los servicios, largas jornadas de trabajo, exigencia al transportista de la descarga del porte, imposibilidad de descansar con dignidad… Éstas son algunas de las situaciones que dificultan y obstaculizan un ejercicio digno y seguro de la actividad del transporte, y que además ponen en peligro, muchas veces, la vida de los/as profesionales. Éstas son, a su vez, las situaciones a las que las administraciones prefieren hacer oídos sordos, ya que su único afán es conseguir un transporte barato, a costa de cualquier cosa.
En 2019 ya han fallecido 14 trabajadores. Entendiendo que es indispensable la socialización de esta lacra, los miembros de la mayoría sindical nos concentraremos el próximo martes, 16 de abril, en la rotonda de Lezo a las 11 horas. La movilización y la lucha son elementos primordiales antes y cuando ocurren accidentes, por lo que ELA, LAB, ESK, STEILAS, EHNE e HIRU seguiremos denunciando cada accidente de trabajo y
apoyando a la familia y amigos del o la trabajadora fallecida.