La Federación Sindical Mundial, la organización clasista de la clase obrera mundial que representa a 97 millones de trabajadores y trabajadoras en los cinco continentes, reitera su solidaridad con el pueblo y la clase obrera del País Vasco, que otra vez más están enfrentados con la persecución estatal del estado burgués.
Esta vez son 47 ciudadanos y ciudadanas vascas que se enfrentan a una petición fiscal de 601 años de prisión en total. Entre ellos se encuentra dirigente de nuestro sindicato afiliado, LAB.
La FSM, como posición de principios, siempre ha estado del lado del pueblo vasco por su derecho inalienable a decidir por si mismo, sin intervenciones e injerencias ajenas, su presente y su futuro.
En ese sentido, rechazamos rotundamente la represión del Estado español y reiteramos la solidaridad de la gran familia de la FSM con las y los presos políticos vascos, reafirmando la firme posición de la FSM de que nadie debe ser perseguido por sus ideas políticas.