Los y las trabajadoras del sector de la hostelería, que terminamos el curso pasado con dos días de huelga, hemos visto cómo, durante todo el verano, se han reforzado todos los argumentos que defendemos. La Patronal pretende aumentar los márgenes de beneficio a nuestra costa. Las cuentas son claras, según el INE, en Bizkaia, desde enero del 2020 el IPC ha subido un 16,9%, la subida de los precios en hoteles, cafés, y restaurantes ha sido del 17,9%, mientras que la subida salarial ha sido de un 0%.
A esta circunstancia, hay que sumarle que, en 2023, se ha batido por segunda vez consecutiva el récord de pernoctaciones en nuestra provincia y el volumen de ventas, a falta de los datos del presente año, que se esperan sean de récord, han aumentado un 33´9% en 2021 y un 40´3% en 2022. Mientras tanto, la subida salarial en nuestro sector ha sido de un 0%.
La negociación se encuentra en una fase de bloqueo total, donde la patronal está muy cómoda y, a diferencia de Gipuzkoa o Araba, no valora una fórmula para paliar la pérdida de poder adquisitivo de sus plantillas. La única alternativa es la organización y la lucha sindical.
Por eso, y por todos los aspectos que han de mejorar en un sector especialmente vulnerable, llamamos a trabajadoras y trabajadores de bares, restaurantes, hoteles, colectividades y de reparto mediante plataforma, a tres nuevas jornadas de huelga los días 4, 11 y 12 de octubre.