Ante el eco mediático despertado por la saturación de diversos Servicios de Urgencias en Osakidetza y las declaraciones del Director General de Osakidetza y el Consejero de Sanidad, LAB-Osasungintza quiere aclarar los siguientes puntos.
• El Sr. Pérez Gil pretende engañarnos y negar los recortes. ¿A qué viene entonces que los abultados incentivos (unos 12.000 euros por persona y año) cobrados por mas de 125 cargos directivos de Osakidetza tuvieran como principal objetivo el “gasto de personal”, con una tasa de consecución de más del 90%? Son sus cifras, no las nuestras.
• El Consejero Bengoa miente y falta gravemente al respeto de las trabajadoras y trabajadores de Osakidetza cuando achaca las movilizaciones contra los recortes y las condiciones laborales a intereses electorales. El ladrón cree que todos son de su condición, ya que el Sr. Bengoa ha pasado por delante de muchas pancartas y nunca se ha parado como el pasado día en el Hospital de Galdakao-Usansolo.
• Pérez Gil está en lo cierto cuando dice que la saturación de los servicios de urgencias de hospitales como el de Cruces-Gurutzeta viene repitiéndose durante muchos inviernos y desde muchos años atrás. Como si fuera algo positivo!. Pero miente cuando dice que es algo puntual, no estructural. Sindicatos como LAB llevamos años denunciando esta situación. La situación de deterioro actual de Osakidetza tiene su origen mucho más atrás y atañe a diversas administraciones. Puesto destacado tiene el Sr. Azcuna, adalid de la privatización de Osakidetza.
• Lo que no dice Pérez Gil es que ahora, fruto de los recortes impuestos, estos colapsos se han multiplicado y se dan en cualquier época. ¿También en agosto pasado, cuando la situación fue caótica en Cruces y los sindicatos lo denunciamos en prensa, había gripe? Por lo tanto, la situación actual SÍ ES CONSECUENCIA DE LOS RECORTES APLICADOS EN OSAKIDETZA, entendiendo estos recortes como un acelerón en la estrategia de debilitamiento de la sanidad pública vasca que ya se venía aplicando.
• Recortes en personal, derivaciones y conciertos con la privada, privatización de ciertos servicios, cierre sistemático de camas, cierre de quirófanos, proyectos de centralización de laboratorios y servicios radiológicos, etc…Todas estas medidas que aparecen en Osakidetza son las mismas que se han llevado a cabo en otros lugares donde los recortes van mucho más rápido: Madrid, Països Catalans, Grecia…
• El objetivo final es ir reduciendo la capacidad del sistema público en beneficio de todas las variedades de sanidad privada. Una estrategia general adoptada en el seno de la Unión Europea y que se va aplicando con distintas intensidades según las circunstancias y resistencia de cada lugar. Así, el dinero de todas y todos pasa a ser de unos pocos. Es clarificador ver cómo gestores de Osakidetza son recompensados con buenos cargos en la sanidad privada, sean hospitales, alta tecnología o farmaceúticas.
Lo que ocurre en las Urgencias de Cruces, Basurto o Donostia es un preocupante síntoma, uno más, de la ofensiva contra la sanidad pública vasca. Situaciones como estas se repiten en centros de salud, en plantas hospitalarias, en Consultas Externas…Y si no conseguimos darle la vuelta mediante la movilización, cada día serán más y más frecuentes. El 29 de marzo, Huelga General, tenemos una gran oportunidad para ello. LAB reivindicará que tras el 29 hay una alternativa también para la sanidad vasca. Una alternativa que pasa por la soberanía para Euskal Herria y el impulso, mejora y crecimiento de todos los servicios públicos. Es decir, una sanidad pública vasca que genere empleo estable, que respete los derechos de las y los trabajadores y que, sobre todo, garantice nuestro derecho a una salud pública gratuita, euskaldun y de calidad.