Ante la falta de cargas de trabajo que prevé en los 6 primeros meses de 2013, la Dirección de CAF ha trasladado al comité de empresa que está barajando la posibilidad de aplicar un ERE de suspensión. Y aunque aún no ha hecho oficial este medida todo parece indicar que lo harán en la reunión que con el Comité de empresa ha convocado para el día 26 de noviembre.
Además, en nuestra opinión, si ahora aceptamos este camino luego podrán venir medidas más duras. No podemos aceptar esta vía de soluciones. Hay otras soluciones a los problemas de cargas de trabajo y exigimos a la dirección que se acuerden con la plantilla soluciones para todos/as.
Los y las trabajadoras de CAF necesitamos soluciones para el futuro de nuestros empleo, no EREs. La política industrial de internacionalización que CAF ha impulsado estos años no ha tenido en cuenta los intereses de todos y todas las trabajadoras. Por lo que las soluciones vendrán de modificar esta política industrial. Una Política industrial que no solo tiene que tener en cuenta los beneficios sino también el mantenimiento de los puestos de trabajo.
Si es real la falta de carga de trabajo, proponemos que el tiempo que estemos sin trabajo se dedique a la formación. Si el objetivo de CAF es proyectarse en el mercado internacional y, para ello aumentar la calidad y seguridad de sus productos, ¿por qué no preparar a los y las trabajadoras para estos retos? Proponemos que no se aplique el ERE y este tiempo se dedique a formar a los y las trabajadoras en temas de calidad, formaciones técnicas, homologaciones internacionales, trabajo en equipo, idiomas,…
CAF tuvo más de 100 millos de € de beneficio en 2011 y con esta medida que afectaría a unos 750 trabajadores puede ahorrarse otros 2,5 millones con dinero público. Esto también nos parece inaceptable y los máximos representantes políticos de este pueblo deberían posicionarse sobre esto.
Por todo esto pedimos a la Dirección de CAF que no haga oficial el anuncio del ERE y se siente a negociar soluciones a los problemas reales de los y las trabajadas. La empresa debe de saber que si no renuncia a la aplicación de este ERE no nos deja más camino que la lucha. Es un sinsentido que por una pequeña gripe nos lleven a la UBI.
Beasain, 21 de noviembre de 2012