Esta semana varios trabajadores de ITP AERO CASTINGS, con plantas en Barakaldo y Sestao han sido diagnosticados como positivos por COVID-19, en total 6 hasta el jueves día 20 de agosto y a la espera de que pueda haber más. Les enviamos un caluroso abrazo con el deseo de una pronta recuperación a todos.
Como viene siendo habitual, nos hemos tenido que volver a enterar de estos gravísimos hechos por nuestros medios, ya que la dirección de empresa tuvo conocimiento de los 2 primeros positivos confirmados durante el pasado fin de semana. Sin embargo, no fue hasta el lunes día 17 de agosto, y después de las interpelaciones de trabajadores y representantes sindicales, cuando la dirección nos confirmó vía e-mail que había 2 compañeros con positivo por COVID-19, 7 personas en cuarentena por Osakidetza y otras varias a la espera de la prueba PCR a través del servicio de prevención pero que continuaban en activo. A pesar de ello, continuaron sin responder al emplazamiento a una reunión con el Comité de Empresa para abordar esta situación.
El 18 de agosto se nos vuelve a notificar, vía e-mail, el número de personas en aislamiento por Osakidetza (7), y que continúan siguiendo las pautas del protocolo interno. Sin embargo, ese mismo día a última hora, se tiene conocimiento gracias a las y los trabajadores del aumento hasta 4 positivos.
Ante esta situación, el miércoles día 19 de agosto a primera hora, intentamos ponernos en contacto con el médico de empresa y RRHH, pero no había nadie. Acto seguido pusimos en conocimiento de OSALAN y Gobierno Vasco la actual situación en nuestros centros de trabajo, tratando de encontrar solución a lo que teníamos encima de la mesa. Cuál fue nuestra sorpresa, cuando después de 3 llamadas a OSALAN, “apareció” a las 11:30 horas en la planta toda la dirección de la empresa, jefa de RRHH y médico incluidos, cuando entre las 09:00 y 10:30 no había nadie. No es hasta las 14:00 que la dirección se sienta a una reunión con la representación de las y los trabajadores, después de estar esperándoles en la puerta hasta que salieron.
Es en esta reunión, cuando se nos comunican los pormenores de lo que esta sucediendo respecto a nuestros compañeros de baja por coronavirus (en este momento ascendían a 5), qué criterio se ha seguido para quienes se encuentran en casa de cuarentena y porqué otros no están en casa pese a estar a la espera del PCR. También se nos traslada que se volvía a activar el protocolo que tuvimos en vigor hasta el fin del confinamiento, con algunos matices y discrepancias que le fueron trasladas a la dirección. Este protocolo que retiró la empresa de manera unilateral aprovechando la “desescalada”, jamás se debió dejar de aplicar y por ello se denunció en Inspección Laboral por el comité.
Desde LAB queremos dejar bien claro que, otra vez, las y los trabajadores hemos tenido que forzar la situación hasta que la empresa ha reaccionado. De nuevo hemos vuelto a constatar que lo único prioritario para nuestra dirección son la producción y los beneficios empresariales. Nuestra salud ocupa el último lugar en sus preocupaciones. Si no fuera así, se hubieran puesto en contacto con la representación social desde el primer momento para buscar una solución efectiva. Pero han vuelto a decidir actuar por su cuenta.¿Cuál es el problema de poner en marcha medidas más drásticas, sobre todo si nos encontramos en una situación de ERTE por una “bajada de pedidos”? ¿Qué intereses se esconden detrás de las actuaciones unilaterales de la dirección? ¿Esquivar constantemente a los y las representantes del Comité de Empresa?
Así mismo, nos vemos en la obligación de denunciar la absoluta y total desidia por parte de Inspección Laboral, OSALAN y el Gobierno Vasco. Y decimos esto con conocimiento de causa, después de las múltiples llamadas y denuncias interpuestas y sus respuestas ambiguas y nada concretas en el mejor de los casos… cuando no, de manera clara, excusando el comportamiento patronal. Queremos dejar bien claro que estamos ante un repunte brutal del número de positivos por COVID-19, que nos encontramos en plena emergencia sanitaria.
Por ello, exigimos la actuación directa y un cambio de rumbo en el proceder de estas instituciones sobre las plantas de ITP AERO CASTINGS. No solo para proteger la salud de los y las trabajadoras sino para evitar una catástrofe sanitaria más allá de los centros de trabajo. A las autoridades competentes no les tiembla el pulso a la hora de actuar de forma contundente contra la vida y ocio de los y las trabajadoras, e incluso culparles de su comportamiento en la propagación del virus. Sin embargo, contra las grandes industrias existe manga ancha para que actúen a su antojo. Esto no es más que otro de los muchos ejemplos de a quién sirven las administraciones públicas y Gobierno Vasco, al capital.
Ante este panorama, nuestra absoluta convicción de que la única forma de parar estos atropellos es con la lucha obrera, con la lucha de clases. Por eso os animamos a no ceder ni un ápice en la defensa de nuestros derechos. Con organización y lucha todo se consigue.