Hace años que LAB es un sindicato comprometido con la libertad sexual y ha sido pionero en realizar una guía y un protocolo para poder vivir la diversidad sexual con libertad en los centros de trabajo, para que las y los representantes de los y las trabajadoras puedan utilizarla como herramienta. Así las cosas, hoy hemos comparecido para presentar la edición renovada y actualizada de la guía y protocolo para garantizar la diversidad sexual en los centros de trabajo, como un paso más frente a la LGTBI+fobia, cuya primera edición data de 2015.
-Protocolo para garantizar la diversidad sexual en los centros de trabajo
Hoy 28 de junio, Día Internacional por la Libertad Sexual, es un día importante para salir a la calle y manifestarnos, al tiempo que denunciamos el burdo intento de desfigurarlo mediante el capitalismo rosa. Hoy queremos centrar la atención en la visibilización en el mundo laboral y en dar a conocer la situación de las personas trabajadoras trans*.
Hace años que el sindicato LAB se comprometió con la libertad sexual y fue pionero en crear una guía y un protocolo como herramientas de trabajo para que la representación de los y las trabajadoras puedan defender nuestro derecho a vivir libremente nuestra diversidad sexual en el trabajo.
Efectivamente, en el mundo laboral también es indispensable identificar y denunciar todos los casos de discriminación y violencia que se dan. La lucha sindical es un elemento importante para denunciar la LGTBI+fobia. De hecho, en el último documento sobre la negociación colectiva editado por el sindicato, se recogen expresamente estas realidades.
En un plano más interno, LAB ha querido dar la opción, en nuestra ficha de afiliación, de identificarse como otro cuerpo o identidad.
El 26 de abril pusimos en marcha una campaña de socialización para mejorar la visibilización de las lesbianas en el trabajo. Cuando el autobús del odio, Hazte Oir, entró en Euskal Herria, les dejamos claro, junto a otros movimientos sociales, que no era bienvenido.
Y como todos los trabajadores y trabajadoras somos diferentes, hemos propuesto medidas y cláusulas para tener en cuenta todas estas realidades.
Pedimos que se adopten planes para la gestión de la diversidad en la empresa:
• Anular cualquier cláusula o norma interna que obstaculice o impida el acceso a la promoción, formación, beneficios sociales, etc., garantizando la ausencia de discriminación directa o indirecta.
• Incluir la LGTBI+fobia como riesgo psicosocial de forma que puedan existir unas medidas de prevención del acoso laboral por esta causa.
• Tipificar cualquier acoso por diversidad sexual como una falta en el procedimiento sancionador, con una adecuada escala de gravedad.
• Tener en cuenta en los permisos familiares definiciones de familia en las que estén incluidas las parejas que forman gais y lesbianas, trans* y bisexuales.
• Ampliar los supuestos del artículo 52.d del Estatuto de los Trabajadores, de forma que se excluyan del cómputo de absentismo para el despido objetivo las faltas de asistencia ocasionadas por consultas, trámites o incapacidad temporal relacionadas con el proceso de transición de las personas trans*.
La Lesbo-Homo-Trans*-Bifobia tiene múltiples caras y se da en todo tipo de ámbitos, también en el mundo laboral: estereotipando nuestras identidades una y otra vez, cuestionando nuestra vida sexual, burlándose, humillándonos… Todas las personas trabajadoras debemos tener los mismos derechos y no sufrir ninguna discriminación, directa o indirectamente, a la hora de ser contratadas, así como en el puesto de trabajo. Tenemos derecho a que se respete nuestra intimidad, nuestra dignidad y a no tener que esconder nuestra orientación e identidad sexual. Y las empresas deben habilitar medidas para prevenir y evitar todas estas discriminaciones.
Con ese fin, hemos renovado la guía y el protocolo que hicimos hace tres años: hemos profundizado en lo que se corresponde al colectivo trans*, en enfocarlo hacia la orientación sexual lo hemos hecho hacia la diversidad de identidades y cuerpos.
Hoy en día, aunque en Hego Euskal Herria haya dos leyes contra la discriminación del colectivo LGTBI+, todavía hay mucho por hacer y sobre todo en el mundo laboral y de cara al colectivo trans*. Es un tema totalmente nuevo en el sindicalismo y nosotras y nosotros también estamos aprendiendo.
De cara a las personas trabajadoras trans*, hay tres momentos que hay que tener en cuenta:
• Antes de hacer la transición, se tiene miedo a perder el puesto de trabajo; por eso la identidad se esconde y se suele retrasar, creando así niveles de estrés, riesgos psicosociales y en algunos casos incluso efectos secundarios físicos.
• Al hacer la transición, puede que se tenga que adecuar el puesto de trabajo o la jornada. Se debería de facilitar mediante permisos para acudir al médico o para realizar trámites administrativos.
• Al finalizar la transición, el acoso y la discriminación se multiplica, pero hay que tener en cuenta que esta discriminación comienza cuando se accede al empleo.
Entendemos la transición cuando las personas trans* deciden vivir con la identidad con la que se sienten “reflejadas”. Muchas de estas transiciones se hacen mediante tratamientos médicos (hormonas, cirugía,…), pero no tiene porqué ser así.
En base a la situación y al momento, nuestras peticiones deben amoldarse.
• Nombre y trato: Derecho a utilizar el nombre en base a su identidad. Se tiene que garantizar desde el momento en el que se comunica a la empresa, aunque todavía no haya realizado el cambio administrativo, por lo menos en las comunicaciones de la empresa (e-mail, identificaciones,…)
• Los baños, uniformes, ropa de trabajo, vestuarios,… se podrán usar teniendo en cuenta su identidad. Se impulsará el unisex.
• Contratación: se tienen que asegurar que las personas trans* no se les impida acceder a un puesto de trabajo por su identidad. Y a su vez, deben tener los mismos derechos de promoción y de carrera profesional.
• Una situación posible: un hombre trans* puede decidir tener descendencia. En este caso, si se quedara embarazado deberá tener los mismos derechos que una mujer embarazada (permisos, licencias,…)
La sensibilización de la clase trabajadora y el trabajo de visibilización es indispensable, y por ello, vamos a impulsar todas esta medidas.
La alianza de las luchas y con el movimiento LGTBI+ contra este sistema es fundamental y nuestro trabajo no se va a limitar únicamente a los centros de trabajo. En este sentido, hacemos un llamamiento a acudir y participar activamente en todas las movilizaciones del movimiento por la libertad y diversidad sexual de Euskal Herria convocadas para el 28 de junio .
Seguiremos luchando por vivir libremente y con dignidad nuestros deseos, cuerpos e identidades en el trabajo y en todos los ámbitos.