Trabajadoras de residencias de mayores de Gipuzkoa han llevado a cabo una jornada de huelga reclamando condiciones laborales dignas y una mejora en el servicio. Las trabajadoras han realizado una manifestación conjunta con asociaciones de personas usuarias en Donostia, que ha partido desde la sede de la Diputación Foral de Gipuzkoa. También han convocado una jornada de huelga para el próximo 30 de marzo.
Esta crisis ha impactado directamente contra las trabajadoras y residentes de las residencias de personas mayores, pero, a pesar de ser incomprensible, la situación sigue igual, desde 2012 sin convenio provincial, con el mismo ratio de trabajadoras desde 2006… El sindicato LAB no está de acuerdo con la últimas declaraciones de Maite Peña, donde dice que los ratios se han incrementado un 10% ya que en las categorías de auxiliar o gerocultora, lo que se ha mejorado es unos minutos por la situación generada por el COVID 19, porque se ha ordenado dejar unas camas vacías por si hubiera otro brote, y en las categorías de monitora y psicólogas no ha habido ningún incremento en las ratios. ¿Qué más tiene que pasar para que se produzcan cambios en el sistema de residencias de personas mayores? ¿Cuándo comenzará la Diputación Foral de Gipuzkoa a asumir su responsabilidad y a dar los pasos necesarios para que la situación cambie?
No podemos olvidar que las trabajadoras están enfermando por ir a trabajar, la carga de trabajo y los ritmos han aumentado y en las empresas no se hacen evaluaciones de riesgos laborales, aunque la ley así lo exija.
No podemos permitir que esta dura situación que viven los residentes y las trabajadoras se prolongue más tiempo, porque es responsabilidad de todas defender este servicio social basado en el cuidado, porque es responsabilidad de la sociedad el bienestar de estas personas.
Las trabajadoras de las residencias de mayores llevan años luchando en defensa de sus derechos, a pesar de que con el establecimiento de los servicios mínimos del 100% no pueden ejercer su derecho a huelga. Ante esta situación tan violenta, es hora de activar a la gente.
Es hora de que el sistema de residencias de personas mayores sea público, gratuito, universal y que ponga en el centro a las personas, y para conseguirlo es imprescindible la participación de todas las partes del sector.