El sindicato se ha concentrado hoy en Gasteiz, ante la sede del Gobierno Vasco en Lakua, dentro de la dinámica “ErlijiOFF”, cuyo objetivo es sacar la asignatura de religión de las aulas. También ha puesto en marcha una recogida de firmas con el mismo objetivo. Hoy se han dirigido con esta petición al Gobierno Vasco, registrando un documento con esta reivindicación en Lakua.
Para construir un sistema educativo reclamado por la mayoría de la comunidad educativa de Euskal Herria, debemos tomar decisiones sobre nuestra educación, adquiriendo la soberanía en la educación. Es imposible construir la escuela pública vasca que necesita Euskal Herria si aceptamos las decisiones que toman Madrid y París al respecto.
Aunque hemos ganado espacios en dirección al modelo propio de educación, el acceso a la soberanía educativa es imprescindible para hacer frente a los retos mencionados. El modelo educativo vasco debe ser consensuado entre la comunidad educativa, la sociedad y las instituciones vascas. Es la premisa básica paracualquieracuerdo opactoeducativo.
Nuestra apuesta estratégica es llegar a tener una sociedad libre que crezca y a su vez desarrolle personas libres. Para ello apostamos por construir un sistema educativo propio que tenga como eje la escuela pública comunitaria. En esta dirección, como hemos dicho, es imprescindible adquirir la soberanía educativa y desarrollar el modelo educativo que necesitamos, aprovechando las fortalezas que tenemos y haciendo frente a los puntos débiles.
Hace cuatro años, LAB puso en marcha la dinámica IRUTEN, la cual pretende dar pasos, generar reflexiones y herramientas eficaces para dar pasos prácticos en la construcción del sistema educativo que necesita Euskal Herria. Abordamos primero el tema de la evaluación educativa y este curso, hemos puesto en marcha una dinámica para sacar la asignatura de Religión de los centros escolares.
LAB ha definido los criterios imprescindibles que deben cumplir los centros para formar parte de la Escuela Pública Comunitaria, y dentro de estos criterios se muestra el carácter laico de la educación. Así, venimos a profundizar en el planteamiento de nuestras bases ideológicas a través de esta nueva dinámica.
Antecedentes y contexto
1. La asignatura de las diferentes religiones (principalmente católica) se oferta en la amplia mayoría de centros educativos públicos y concertados de Euskal Herria. La religión es uno de los elementos más segregadores que tenemos hoy en día. Queremos denunciar que las religiones no tienen cabida en los currículos de ningún centro.
2. Es sabido que en una época los profesores de religión tuvieron un acceso un oscuro a la enseñanza pública no universitaria de la CAPV. El salto a la docencia provenía de una bolsa de trabajo o lista gestionada por el Obispado, pudiendo luego computar los méritos en las demás especialidades. En la actualidad, aunque estas listas son gestionadas por la Administración, el obispado establece las condiciones para poder acceder a ellas. Entendemos que es inaceptable que una organización religiosa establezca criterios para una lista pública.
3. La jornada laboral de estos profesores y profesoras de religión se limita en general a la impartición de unas sesiones de religión, sin necesidad de participar en diferentes actividades y proyectos del centro. Además, muchos de estos y estas profesoras no cumplen en absoluto su jornada semanal, estando contratados y contratadas a jornada completa y trabajando una media de 10 horas semanales, profundizando así gravemente en la brecha entre docentes, y con cargas de trabajo mucho más bajas. Y esta situación injusta provoca importantes enfrentamientos entre el profesorado. La conclusión es clara: estos y estas profesoras tienen una situación privilegiada con la protección, autorización y bendición del Gobierno Vasco.
4. LAB apuesta por un procedimiento consensuado para sacar la asignatura de religión de los centros y así, recolocar al profesorado fijo y provisional, articulando los mecanismos de garantía correspondientes y garantizando los principios de transparencia. Al igual que el resto de docentes, deberán adquirir el puesto de trabajo mediante bolsas públicas y procesos de estabilidad, sin injerencias de la iglesia y en igualdad de condiciones, que se asignarán con los mismos derechos y obligaciones.
5. LAB quiere manifestar que no quiere poner el foco en el profesorado de religión, ya que no son responsables de la situación que se da hoy en día. Toda la responsabilidad política y la competencia para la solución es del Gobierno Vasco y desde aquí aprovechamos para interpelarle directamente, para que tome las riendas sobre el tema y acuerde un sistema educativo no religioso con la comunidad educativa.
Para ello pedimos que se pongan en marcha las siguientes medidas en el camino de una educación laica real:
• Medidas a corto plazo
◦ Acabar con los privilegios de estos y estas profesoras. Adecuar la contratación al horario de trabajo al igual que se hace con el resto del profesorado.
◦ Que la gestión de las listas quede a disposición de la Administración sin la injerencia de la iglesia, respetando los principios de igualdad, transparencia, mérito y capacidad, y mientras tanto:
▪ Que impartan sólo la asignatura de religión.
▪ Computar meritajes del profesorado sustituto de religión exclusivamente en el ámbito
religioso y cancelar la posibilidad de pasar a las restantes listas en los procesos de
baremación.
◦ Equiparar los ratios del alumnado con las demás materias optativas y revisar estos ratios.
◦ Que la asignatura de religión no influya en el expediente acádemico.
◦ Revisión del número de trabajos fijos de religión católica.
◦ No financiar con dinero público la formación del profesorado de religión en el caso de que la
imparta el obispado.
• Medidas a medio plazo
◦ Acordar el procedimiento de recolocación de estos y estas docentes. La Administración y la parte social deberán articular una solución acordada, garantizando siempre los mecanismos de garantía y los principios de transparencia correspondientes.
◦ Articular un sistema educativo soberano.
◦ Acabar con el concordato entre el estado y la iglesia.
◦ Que los centros que ofrezcan la asignatura de religión no reciban financiación pública.