Hemos pasado por diversas instituciones públicas, entre ellas, el ayuntamiento, la Diputación, las universidades, las oficinas del Gobierno Vasco y Emakunde, para hacer un llamamiento de cara al 22 de abril.
Tal y como ha reconocido el propio Gobierno Vasco, nuestro sector público tiene la mayor tasa de temporalidad del Estado español y de Europa. La tasa supera el 40% y no es una excepción, sino una realidad que se repite de forma sistemática, generalizada y en muchos casos fraudulenta en todas las administraciones, sectores y ámbitos.
Las políticas puestas en marcha en el empleo público, que han supuesto y suponen el debilitamiento de los servicios públicos y la precarización de los empleados y empleadas públicos, solo pueden entenderse como pasos previos a la subcontratación y a la privatización. Así pues, nuestros gobernantes toman la decisión política de hacer negocio con los servicios públicos y promueven medidas encaminadas a ello.
Esta situación ha sido provocada por las decisiones que los distintos gobiernos han tomado a lo largo de los años, gobiernos de cualquier color o ámbito geográfico.
Pikete feminista
La movilización de Gasteiz da continuidad a la dinámica de protestas que estamos llevando a cabo en las últimas semanas en defensa del sector público. El lunes salió a la calle nuestro pikete feminista para denunciar la situación de las mujeres en los servicios públicos. Para ello, nos movilizamos en Bilbo, ante el hospital de Basurto.