Los sindicatos LAB, ELA, CCOO, ESK, Steilas, CGT, CNT y Solidari han ofrecido esta mañana una rueda de prensa en Pamplona para hacer pública una lectura compartida de la situación del sistema sanitario en Navarra y sumarse a la manifestación convocada por la Plataforma de Salud de Navarra para el 18 de febrero por la tarde en la capital navarra.
La crisis sanitaria provocada por la Covid 19 ha supuesto un cambio social sin precedentes, en términos generales, y en el ámbito de la salud, en particular. Se han puesto de manifiesto una serie de fallos del sistema de carácter estructural que ponen a los/las trabajadores/as de la Sanidad Pública contra las cuerdas, con una merma en las condiciones laborales que les impide en muchos servicios y áreas poder proporcionar una atención de calidad en los cuidados y una mínima seguridad al paciente.
Gestionar una pandemia no puede ser tarea fácil para ninguna Administración pero, después de dos años, la dirección de Osasunbidea no ha establecido en ningún momento una hoja de ruta concreta por la que transitar. Al contrario, ha mostrado una completa falta de previsión, actuando en una permanente improvisación en materia de personal, sin anteponerse a las olas y variantes generadas por el Covid. A pesar de que al comienzo de la primera ola en marzo de 2020 se dio una apuesta de afrontamiento ambiciosa en lo cuantitativo, con un volumen de contratación amplio, no podemos decir lo mismo a nivel cualitativo pues no se han implementado unas adecuadas condiciones laborales del personal, tanto sanitario como no sanitario. Destaca la situación del personal contratado, siendo el más afectado, el cual se ve abocado a asumir y prorrogar contratos muy precarizados, en lugar de acceder a una contratación digna y estable.
Todos estos factores, han multiplicado el agotamiento físico, emocional y psicológico al que la plantilla de Osasunbidea está siendo sometida desde hace dos años, y han terminado por llenar una mochila de deficiencias que se venían arrastrando desde hace muchos años. Definitivamente, la Administración ha suspendido en su obligación de cuidar a quiénes cuidan.
El estado actual de la plantilla es de desmotivación, decepción y hartazgo, una situación ante la cual lo único que no se puede hacer es no hacer nada. La plantilla de Osasunbidea demanda respuestas decididas por parte de sus representantes sindicales. También organizaciones ciudadanas y sociales aglutinadas en la Plataforma Navarra de Salud/Nafarroako Osasun Plataforma, preocupadas por la situación de la Sanidad Pública navarra, conscientes de que el adecuado servicio público de salud pasa por unas condiciones laborales dignas para su personal, han considerado oportuno aunar fuerzas en defensa de este objetivo común que tenemos usuarios/as y profesionales, la salvaguarda de la Sanidad Pública.
Por este motivo, varios sindicatos, haciéndonos eco de la demanda de las trabajadoras/os de Osasunbidea y de los usuarios/as representados en ésta Plataforma, hemos entendido que es el momento de aunar esfuerzos y de dejar a un lado diferencias que en otras circunstancias nos pueden llegar a separar.
Es el momento de dar un puñetazo encima de la mesa y exigir soluciones ya, por lo que nos sumamos a la manifestación que impulsa la Plataforma Navarra de Salud/Nafarroako Osasun Plataforma y a la que invitamos a asistir tanto a trabajadores/as como a usuarios/as de Sanidad Pública navarra, que tendrá lugar el viernes 18 de febrero de 2022, con salida a las 19h desde Baluarte.
El espectro de reivindicaciones sindicales es amplio pero son estos los ejes que entendemos se deben atender prioritariamente:
- Dimensionamiento y estabilización de la plantilla, atajando las intolerables tasas de temporalidad y la saturación en muchos servicios.
- Dignificación de la contratación, tanto del personal temporal de Osasunbidea (acceso a la formación, limitación de la movilidad, contratos de mayor duración), como de las contratas de limpieza o lavandería en las cuales se soportan altas cargas de trabajo, tendiendo a su progresiva publificación.
- Fin de las discriminaciones, tal y como ocurre en el acceso a la carrera profesional, la cual debe implementarse para todo el personal, tanto funcionario como contratado; o en el reconocimiento de complementos como el de riesgos.
- Captación de los fondos públicos que actualmente se destinan a Mutua Navarra para la cobertura de las contingencias comunes, concertando ésta con el Sistema Sanitario Público.
- Optimización de los recursos públicos evitando los altos pagos en productividades en las actividades extraordinarias que suponen un gasto innecesario que puede ser revertido en redistribución salarial al conjunto de todos/as l@s trabajador@s y otras medidas de mejora para actuar contra las listas de espera.
Por último, quisiéramos incidir con mayor énfasis en algo tan básico como lo es la exigencia de que el Departamento de Salud implemente las medidas comprometidas para la mejora de la Atención Primaria. Demandamos que se pase de las palabras a los hechos de manera urgente y que se anuncien las fechas concretas en las que dichas medidas verán la luz.
Insistimos, sin unas adecuadas condiciones laborales no se puede garantizar una adecuada atención a la población. Por ello, desde la unidad sindical y desde la confluencia de usuarios/as y profesionales, llenemos las calles el próximo 18 de febrero, en defensa de ese bien común e indispensable que es nuestra Sanidad Pública.