Tal y como alertó el sindicato LAB a principios de este mes, la dirección estatal de Médicos del Mundo ha consumado el despido de tres compañeras del programa “Tu Barrio, Tu Casa” que se llevaba a cabo en el barrio iruindarra de Arrosadia-Milagrosa.
La empresa alega causas económicas objetivas para argumentar el cierre del programa y el despido de las tres compañeras, algo sorprendente e incomprensible, ya que es la empresa la que ha rehusado presentarse a las convocatorias de subvenciones del Departamento de Políticas Migratorias del Gobierno de Navarra, en la que sí participó el año pasado; este año sorprendentemente no ha participado. Ni que decir tiene que fruto de la incompetencia del coordinador de sede de Navarra se perdió la opción de cobrar 9.881€ de la subvención por falta de la contratación de personal y por no justificar gastos económicos realizados en 2020.
Entre las causas organizativas que alega la empresa, se encuentran motivaciones técnicas por parte del equipo directivo, que han valorado el impacto del proyecto en el barrio y en supuesta concordancia con las líneas estratégicas de MdM con un nivel “medio-bajo”. Alegaciones basadas en un estudio de 2016, cuando apenas llevaba el proyecto en marcha un año y que el equipo técnico ha sabido rebatir aportando documentación, argumentos y numerosos apoyos en el barrio, avalando el excelente trabajo realizado durante los cinco años de trayecto y la necesidad de continuidad con respecto a instituciones públicas, tejido asociativo y vecinas y vecinos del barrio.
Pese a que inicialmente la empresa informo de un cierre ordenado y escalonado, han hecho todo lo contrario, informando de los despidos vía burofax, sin preaviso de 15 días como marca la ley, con las actividades ya programadas, con usuarias confirmadas y servicios técnicos contratados, pero sin el personal de MdM encargado del mismo para hacer el acompañamiento y la recopilación de documentación necesaria para su justificación ante la financiera. El cierre del programa también ha supuesto la interrupción de la actividad del grupo de personas voluntarias adheridas al proyecto.
El cierre de este servicio es un tremendo golpe para las tres trabajadoras, a las cuales no se les ofrece ninguna alternativa ni opción de recolocación, demostrando el verdadero talante de la dirección estatal, y además, supone el cierre de un servicio fundamental para avanzar en la convivencia intercultural en el barrio de Arrosadia-Milagrosa. Siendo estas personas y este barrio el otro gran perjudicado. Máxime, siendo este programa el pilar fundamental sobre el cual se iba a sustentar la intervención de pliego licitado recientemente de convivencia gitano romaní en el barrio, el cual va a encontrarse solo por la desaparición del programa en cuestión.
LAB quiere denunciar las formas y el fondo de estas medidas adoptadas por la dirección estatal de MdM, y exige la readmisión de las compañeras despedidas y la adopción de todas las medidas necesarias para evitar el cierre del servicio, por ejemplo presentarse a la convocatoria de subvenciones. Exigimos respeto para el barrio, para las personas usuarias y para las trabajadoras. Reclamamos que se den todos los pasos necesarios de manera urgente para contar con una la junta directiva autonómica para que podamos contar con un órgano representativo en Navarra.