Ha llegado el día del primer juicio colectivo en Euskal Herria de cara al reconocimiento laboral de los y las trabajadoras de Glovo. Desde el sindicato LAB, en coherencia con el recorrido realizado estos últimos años, hemos estado presentes para defender el carácter laboral de sus contratos. Esto supone un importantísimo hito para la regularización de cientos de trabajadores y trabajadoras que padecen la cara más moderna de la precarización. Esto es, supone un primer paso frente a la llamada uberización de las relaciones laborales, que a día de hoy nos aboca a acudir a los juzgados, siendo esto quizás la primera de las cuestiones a denunciar: ¿cómo es posible que, habiendo doctrina del Tribunal Supremo, esta empresa pueda seguir arrastrando impunemente al juzgado a sus plantillas para el reconocimiento de los derechos laborales más básicos?
En otro orden de cosas, vemos como se dilata la tantas veces anunciada regularización del sector, dando pié a los grandes lobbies, que apuestan por la digitalización, a seguir ejerciendo su presión. Es el momento de que los partidos políticos se posicionen en Euskal Herria y adquieran un compromiso, no solo con los y las repartidoras a domicilio, sino con todos los sectores afectados por estas prácticas fraudulentas.
Por todo ello, nos hemos movilizado en los Jardines de Albia de Bilbo, ante los juzgados, en respaldo y solidaridad hacia los riders y en defensa de sus derechos laborales.